Ensaladas templadas fáciles y originales para el invierno

Eres toda una fan de las ensaladas pero pensar en ellas cuando los termómetros se desploman es misión imposible. ¡No renuncies a ellas! Apuesta por las ensaladas templadas, una opción perfecta y con un amplio abanico de posibilidades para disfrutar cuidándote en la temporada invernal. Ficha estas recetas tan fáciles y originales.

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¿Quién ha dicho que las ensaladas son solo para el verano? Si las preparas templadas, son una opción perfecta para incluir alimentos saludables y ligeros también en tu dieta de invierno. Su secreto está en mezclar ingredientes crudos con otros cocinados, consiguiendo, así, deliciosos contrastes de sabores junto a distintas texturas y temperaturas que dan al plato un toque sorprendente y muy agradable.

Con un poco de imaginación puedes hacer ensaladas templadas realmente deliciosas, combinando vegetales variados, sobre todo la imprescindible lechuga, con pescados y mariscos, carnes, frutos secos, queso... Aquí tienes algunas propuestas sencillas que te animamos a probar:

Ensalada de escarola y calamares

Ingredientes:
  • 250 gramos de calamares (mejor pequeños)
  • 1 escarola (también puedes utilizar cualquier lechuga)
  • 1 cebolla
  • 1 diente de ajo
  • Harina, sal, aceite de oliva y el zumo de 1/2 limón
Limpia los calamares y trocéalos en aros finos. Corta la cebolla, también en aros, y pásalos por harina. Una vez hechos estos dos pasos previos, calienta un poco de aceite en una sartén y fríe unos segundos el ajo laminado. Retira del fuego y reserva. En el mismo aceite, fríe los aros de cebolla y, a continuación, los calamares.

Monta la ensalada colocando un lecho generoso de escarola en cada plato. Sobre ella, vierte unos calamares y unos aros de cebolla fritos. Para hacer el aliño, mezcla en un bote de cristal unas cucharadas del aceite de freír, al que habrás de incorporar los ajos que habías reservado, y el zumo de limón. Vierte el aliño templado (microondas) sobre tu ensalada y ¡disfruta!

Ensalada de queso de cabra y frutos secos

Ingredientes:
  • 1 lechuga (mejor hoja de roble)
  • 150 gramos de queso de cabra (en rulo)
  • 50 gramos de frutos secos (nueces, piñones, pasas...)
  • Para el aliño: aceite de oliva, vinagre de jerez y una cucharada de miel
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Mientras y lavas y troceas la lechuga, calienta en la rejilla del horno el trozo de rulo de queso de cabra (estará listo en unos 10-15 minutos). Cuando esté templado y empiece a fundirse, retíralo y colócalo sobre la lechuga. Incorpora tus frutos secos favoritos (con nueces queda delicioso) y, para terminar, añade el aliño que habrás preparado mezclando 4-5 cucharadas de aceite de oliva, 2 de vinagre suave y 1 de miel.

Ensalada templada de pollo y piña con yogur

Ingredientes:
  • 150 gramos de pechuga de pollo
  • 1-2 rodajas de piña en su jugo
  • 200 gramos de lechugas variadas (iceberg, romana, trocadero...)
  • 1 yogur natural
  • 1 cucharada de mostaza (suave)
Coloca la mezcla de lechugas en el plato. Cocina a la plancha, primero, la pechuga de pollo y, seguidamente, las rodajas de piña (sólo unos segundos por cada lado). Trocea el pollo y la piña en cuadraditos y distribúyelos sobre la lechuga. Para el aliño, añade al yogur natural, unas cucharadas del jugo de la piña y una de mostaza, removiendo bien. Calienta en microondas, unos segundos, y vuelca esta sencilla salsa sobre la ensalada. El contraste de sabores resulta una delicia.

Ensalada de gulas y gambas

Ingredientes:
  • 200 gramos de canónigos o berros
  • 50 gramos de gambas (pueden ser congeladas)
  • 100 gramos de gulas
  • 2 dientes de ajo
  • 1 guindilla (mejor verde)
  • Aceite de oliva y sal al gusto
La Gula del Norte
Lava los canónigos y prepara con ellos, en el plato, la base de tu ensalada. En una sartén con unas cucharadas de aceite, sofríe las gambas y las gulas junto a los ajos laminados y la guindilla. Cuando las gambas ya estén doraditas, incorpora todos estos ingredientes (ajos incluidos) sobre los canónigos y ¡listo!

Ensalada de endivias con salmón

Ingredientes:
  • 1 endivia (por comensal)
  • 150 gramos de salmón ahumado
  • 75 gramos de queso roquefort (o queso azul)
  • 100 ml. de nata líquida
  • Pimienta negra molida
Prepara las endivias y coloca sobre cada hoja una loncha de salmón ahumado. Calienta en un cazo la nata líquida deshaciendo en ella el queso (fuego muy suave). Cuando el queso y la nata tengan una consistencia de salsa (5 minutos), viértela sobre las endivias con salmón. Adereza con un toque de pimienta y disfruta de esta deliciosa y nutritiva propuesta.
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