El calor extremo, el sol intenso, la sal del mar, el cloro de la piscina… El verano causa estragos en nuestro cuerpo y en nuestra piel. Si estás harta de sufrir año tras año las consecuencias negativas de esta época del año tan bonita, es hora de poner en práctica unos sencillos, prácticos y efectivos trucos para potenciar tu belleza y dejar que el sol saque solo lo mejor de ti. ¡Ponte guapa!
Cuando los termómetros suben, la delicada piel del rostro necesita cuidados extra para mantenerse sana y elástica. ¿Qué hacer? Una mascarilla facial a base de plátano, papaya y uva. Bate las frutas hasta formar una pasta consistente, aplica en el cutis y deja que actúe unos minutos. Después, aclara con abundante agua tibia y finaliza con fría. Tu rostro quedará revitalizado y luminoso.
Después de un periodo de mar y montaña, o debido a las inclemencias del tiempo, la piel necesita recuperar toda el agua que ha perdido. Para este fin prepárate una mascarilla natural:
Efectúa la misma operación una vez por semana.
El secreto mejor guardado para retrasar al máximo la aparición de arrugas es la protección solar. Así que extrema las precauciones en verano y no salgas a la calle sin ella. Además, el protector solar es lo único que te protege frente a las peligrosas quemaduras solares y las temidas manchas.
Hay días en los que tu piel delata el cansancio, para mejorar este estado en tu piel, prepara una pasta hecha con un plátano machacado a la que previamente le habrás añadido unas gotas de zumo de limón. Aplica la mezcla sobre la piel y deja actuar durante 10 minutos. Finalmente retíralo con un pañuelo suave y aclara con abundante agua tibia.
El agua de playas y piscinas, incluyendo el sol, reseca mucho el pelo, dejándolo triste y apagado. Para devolver el brillo a tu cabello, nada como realizar el último aclarado tras lavarte el pelo con un vaso de vinagre de vino blanco. Si lo que necesitas es hidratarlo y nutrirlo para que recupere su sedosidad, aplica aceite de coco en las puntas.
Con la depilación, la piel sufre mucho. Alíate con los aceites naturales para calmarla e hidratarla al máximo. Aceite de almendras, de rosa mosqueta, de aloe vera… Dejarán tu piel suave, tersa ¡y sin granitos ni rojeces!
La sequedad en los labios también es frecuente en verano. Exfóliatelos con agua fría frotando suavemente un cepillo de dientes por ellos para eliminar las pieles muertas y aplica miel después para dejarlos jugosos. Para casos extremos, aplica una fina capa de miel antes de ir a dormir y a la mañana siguiente verás el resultado. ¡Irresistibles!
Durante el verano, las salidas nocturnas se prolongan muchas veces hasta el amanecer. Si tu mirada se resiente por la falta de sueño y aparecen antiestéticas bolsas y ojeras, ponte cada día dos rodajas de patata sobre los ojos durante 10 minutos. Notarás la diferencia, ¡además de refrescar tus ojos!
¿A la hora de pintarte las uñas tu esmalte deja antiestéticos grumitos? La razón es el calor, así que ¡no lo tires! Pon el frasco en la nevera antes de pintártelas y te quedarán perfectas.
Son las grandes sufridoras. Un gran tratamiento para suavizar unas manos secas y estropeadas consiste en mezclar dos cucharaditas de avena con agua y dejar reposar la mezcla hasta que el agua se vuelva de un tono blanquecino. Introduce las manos en ese agua durante unos minutos. Notarás que tus manos están mucho más suaves y tersas.
La cafeína es el enemigo número uno de la celulitis, así que prueba a fabricar tu propio exfoliante anticelulítico casero a base de café en la comodidad de tu hogar. Mezcla media taza de café molido con dos cucharaditas de aceite de oliva hasta crear una pasta. Aplica con masajes circulares en las zonas con celulitis, como las piernas, el abdomen y los glúteos. Si tienes tiempo, deja que la pasta actúe en la piel hasta 30 minutos. Aclara con agua tibia y seca bien. No solo te ayudará a combatir la celulitis, también a exfoliar la piel de manera suave y a hidratarla gracias al aceite de oliva.
Para aprovechar al máximo los rayos del sol haciendo que en tu pelo aparezcan unos bonitos reflejos dorados, aplica una infusión de manzanilla sobre el cabello y déjalo secar al aire bajo la luz del sol.
