
La plancha, es una de las tareas domésticas que más pereza nos da realizar. Normalmente el esfuerzo físico que conlleva y lo aburrido que resulta es lo que más nos echa para atrás.
Para facilitarnos la tarea, Philips nos ofrece unos trucos y consejos con los que aligeraremos el tiempo de planchado y nos resultará mucho menos costoso dejar nuestra ropa perfecta.
Cuando nos enfrentamos a grandes sábanas o incluso fundas nórdicas, nunca sabemos por dónde echarlas mano y es que a menudo son cuatro veces el tamaño de nuestra tabla por lo que nunca quedan bien. Pero hay un truco, haz trampa y colócala sobre la cama para plancharla allí directamente. Si tienes fundas con muchos detalles, ten cuidado y da la vuelta a la funda para que no enganches ni tires de los adornos.
Introduce las prendas de algodón que vayas a planchar en una bolsa de plástico durante 2 horas. Transcurrido ese tiempo, sácalas y plánchalas directamente. El planchado resultará mucho más fácil y rápido.
El lino se arruga muchísimo y muchas veces cuando estamos planchando una prenda de este tejido nos damos cuenta de que con el propio movimiento vuelve a arrugarse. La solución está en la preparación. Lava la prenda y cuélgala para que se seque a su caída, de ese modo muchas de las arrugas desaparecerán de forma natural.
También puedes colocar la prenda a su caída sobre una toalla seca y alisar las arrugas lo más que puedas. Una vez seca, plánchala con vapor.
Muchos de los dibujos que tienen las camisetas se quedan "pegados" a la plancha por lo que podemos estropear las dos cosas, la camiseta y la plancha.
Si vas a planchar prendas con pegatinas o dibujos, lo único que tienes que hacer es plancharlas por el revés y colocar un trapo sobre ellas, a modo de protección, por si acaso.
Que los hombros de tus chaquetas y abrigos no queden bien, no es una cuestión de que sean difíciles de planchar sino de que al colgarlos adoptan una forma que no deberían. Para evitarlo debes colgar chaquetas y abrigos en perchas más resistentes para que los hombros queden bien sentados.
Si tienes muchas de estas prendas de ropa por planchar y dispones de poco tiempo te aconsejamos que abroches todas las cremalleras y botones antes de planchar.
De esta forma te resultará más sencillo y te asegurarás además de planchar los pliegues naturales de la prenda en el lugar adecuado. Así́ también evitarás que la ropa se deforme antes de guardarla.
Las prendas de punto y la ropa más suelta, como las camisetas, deben guardarse debidamente dobladas en cajones en los que dispongan de espacio suficiente para que no aparezcan arrugas.
Envuelve todas las prendas en papel de seda, de esta forma no se acumulará la humedad y tus prendas llegarán a destino mucho menos arrugadas, pero también puedes apostar por este práctico truco para cuando tienes poca maleta, mucha ropa y quieres que permanezca intacta.
Puedes colgarlos o doblarlos, como prefieras, pero si vas a colgarlos merece la pena invertir en "perchas de pinzas" para colgarlos por la cintura colocando la pinza en un lugar en el que no pueda verse la marca cuando te los pongas, así mantendrás los pantalones perfectamente planchados.
Si descubres una arruga ligera en tu ropa, no saques la plancha, ficha este truco: