Vino tinto: el regalo perfecto para mamá por sus beneficios para la mujer

Investigaciones científicas demuestran los beneficios que el consumo moderado de vino tinto aporta a la salud femenina. ¡Descúbrelos!

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Se acerca el Día de la Madre, y tenemos la oportunidad perfecta para homenajear a mamá. Perfumes, ropa, libros, joyas y cosméticos pueden ser una buena elección como regalo, pero cada vez son más aquellas que saben apreciar el valor de una buena botella de vino como regalo en este día.

"El carácter distintivo del vino a efectos de salud viene dado por los compuestos aromáticos y por los compuestos fenólicos como el resveratrol, los antioxidantes y los polifenoles", asegura Domingo Valiente, Secretario General de la Fundación para la Investigación del Vino y la Nutrición (FIVIN).

Según los últimos estudios, entre ellos el de vinoteca Lavinia, alrededor de un 84% de las mujeres elige vino para acompañar sus comidas cuando van a un restaurante. Este aplastante resultado demuestra que el vino también es cosa de mujeres. Además, el estudio, que ha contado con la participación de 580 mujeres de toda España, pone fin a mitos como que los vinos blancos, ligeros o dulces son los favoritos de las mujeres. En concreto, la mayoría elige vinos tintos potentes y con carácter, por delante de otros tintos más ligeros o afrutados.

Además de por su sabor, las mujeres se dejan seducir por un buen vino cada vez más atraídas por las últimas investigaciones científicas que aseguran que el consumo moderado de vino es especialmente beneficioso para la salud femenina. No obstante, las investigaciones por parte de los científicos sobre los componentes del vino tinto y sus efectos en el cuerpo humano y las mujeres, comenzaron en los años 90 a raíz del curioso dato de que las mujeres francesas, consumidoras de vino sufrían un porcentaje muy bajo de enfermedades cardiacas. Y es que, prestigiosos estudios de salud demuestran los beneficios de un consumo moderado de vino tinto. Es conocido que previene enfermedades del corazón pero otros estudios más recientes indican que también previe y alivia los efectos de otras enfermedades como la demencia, la diabetes o la osteoporosis.

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El Consejo Regulador de la D.O. Ca. Rioja ha agrupado los resultados de los últimos estudios en los que se demuestra que beber con moderación puede ayudar a prevenir enfermedades y/o dolencias en mujeres:

Huesos y articulaciones

Estudios realizados en Suecia han descubierto que beber una media de 5 a 10 copas de vino tinto a la semana puede cortar el riesgo de desarrollar artritis reumática en más de un 50% frente a los no consumidores de vino.

Además, otros estudios han concluido que el consumo moderado de vino tinto está asociado al aumento de la densidad de los huesos en mujeres de la tercera edad, reduciendo de este modo su riesgo a padecer osteoporosis.

Ovarios

Un estudio australiano afirma que las mujeres que consumen una o dos copas de vino diarias han mostrado la mitad de riesgo de desarrollar un cáncer de ovarios si las comparamos con las mujeres no bebedoras o aquellas que beben cerveza o bebidas espirituosas.

Ayuda prevenir el cáncer de mama

Beber cualquier tipo de bebida alcohólica aumenta el riesgo de cáncer de mama. Sin embargo, el consumo de vino tinto tiene el efecto contrario ya que los productos químicos en la piel y semillas de las uvas rojas reducen los niveles de estrógeno y aumentan los niveles de testosterona en las mujeres premenopáusicas, lo que significa un menor riesgo de desarrollar cáncer de mama.

Reduce el riesgo de cáncer de garganta

De acuerdo con un estudio publicado en marzo del 2011, beber vino con moderación puede proteger de la aparición del cáncer de esófago. Los investigadores descubrieron que los sujetos que consumían entre 7 y 14 vasos de vino a la semana reducían las posibilidades de desarrollar la enfermedad en un 56% de los casos.

Páncreas

Las mujeres que consumen cantidades moderadas de vino tiene más posibilidades de prevenir la diabetes de tipo 2. Un estudio de la Universidad de Salud Pública de Harvard realizado entre mujeres mayores de 25 años que consumían un o dos vasos de vino al día tenían un 58% menos de probabilidades de tener diabetes que las no bebedoras.

Según Rosa María Lamuela, miembro del comité científico de FIVIN: "Un consumo moderado de vino no perjudica al diabético, y actúa de bactericida. También ayuda a mejorar la digestión, y es benéfico para problemas de halitosis, faringitis crónica, úlceras, diarreas y estreñimiento".

Retarda el envejecimiento

El vino tinto posee resveratrol, un compuesto que se encuentra en la piel de las uvas tintas que retrasa el envejecimiento. Sus propiedades vasodilatadoras combaten algunas enfermedades originadas por la oxidación de las células.

Además, según una investigación de junio de 2014 de la Universidad de Berlín, en Alemania, el mismo resveratrol previene también demencias y enfermedades degenerativas de nuestro cerebro. Mejora la memoria de las personas.

Previene el Alzheimer

El consumo moderado de vino tinto puede ayudar a retrasar la llegada de la demencia senil y otras formas de demencia como el Alzheimer.

Hay dos proteínas peptídicas relacionadas con el Alzheimer. Estas proteínas tienen tendencia a unirse formando placas que rodean y matan células cerebrales. Estudios de las Universidades de California, Los Ángeles y Mt. Sinai, la Escuela de Medicina de Nueva York, han descubierto que los polifenoles, sustancia que se encuentra en las semillas de las uvas vinícolas, evitan la formación de estas placas.

Ayuda a mantener la gripe y catarros alejados

Un estudio español demostró que aquellos que consumían de 8 a 14 copas de vino tinto en una semana eran menos propensos a coger un resfriado que los que bebían cerveza, bebidas espirituosas o nada de alcohol.

Estudios de la Universidad de Carolina del Sur aseguran que la sustancia química, un polifenol denominado "quercetina", que se encuentra en el vino tinto, las manzanas y las cebollas, ayudan a proteger contra la gripe.

Aumenta las endorfinas y reduce el riesgo de depresión

El vino tinto libera endorfinas en nuestro organismo lo que hace nos relajemos y disfrutemos más del momento. Otro estudio realizado por un equipo de varias Universidades Españolas con más de 5.500 hombres y mujeres de entre 55 y 80 años y sus hábitos de consumo, encontraron que los que tomaban entre dos y siete copas de vino a la semana, eran menos propensos a ser diagnosticados de depresión.

Quema grasas

El vino tinto activa un gen que impide la formación de nuevas células de grasa y estimula las existentes para depurarlas y eliminarlas poco a poco. Para ver resultados óptimos en tu figura, recuerda que no se debe beber más de una copa al día, así como llevar una dieta equilibrada.

Reduce el colesterol y mejora la salud cardiovascular

Investigadores españoles concluyen que las uvas que se destinan para el vino tinto contienen significantes niveles de fibra. Han detectado que la fibra y los antioxidantes que se encuentra en la variedad Tempranillo, en particular, parecen reducir más la presión sanguínea y el colesterol que otras fuentes más conocidas de fibra como la avena.

Disminuye la concentración de placas aterogénicas en las arterias y aumenta los niveles de HDL o colesterol bueno, lo que mejora la salud cardiovascular. El citado resveratrol, sustancia química rica en antioxidantes, nos ayuda a cuidar nuestros vasos sanguíneos evitando la formación de coágulos y la reducción del llamado colesterol malo.

"Otros beneficios que aporta el consumo moderado de vino es el aumento del colesterol HDL (colesterol bueno). Las lipoproteínas de alta densidad participan activamente en la depuración del colesterol en exceso dentro del organismo", añade Rosa María Lamuela.

Por si fuera poco, científicos europeos han asociado el consumo moderado de alcohol, especialmente del vino, a mayores niveles de ácidos grasos y de Omega 3 en la sangre. Estos ácidos grasos ayudan a reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares. Como el cuerpo no produce naturalmente estos ácidos grasos, tiene que sintetizar estas dosis de Omega 3 procedente de aceites vegetales con la ayuda del alcohol.

Cuida el corazón

Numerosos estudios han demostrado que un consumo regular y moderado de vino tinto (una o dos copas al día) ayuda a una mejor circulación de la sangre y disminuye el riesgo de enfermedades cardiovasculares.

En concreto, un estudio de la Universidad de Stanford ha descubierto que uno de los factores del vino es que activa una enzima llamada "aldehyde dehydrogenase 2". Esta enzima elimina elementos tóxicos, previniendo daños adicionales a las células del corazón.

Por otra parte, según Douglas McKeag, director de la Universidad de Medicina Deportiva de Indiana, "no es perjudicial para tu salud si bebes un poco de vino antes de hacer ejercicio, de hecho, estimula el corazón". Otro beneficio físico es la dilatación de los vasos sanguíneos y la relajación de los músculos.

Combate las infecciones urinarias

Gracias a sus propiedades antioxidantes y astringentes, logra evitar que las bacterias se adhieran a nuestra vejiga o riñones y optimiza el filtrado y depuración de estos órganos. Baja el riesgo de la formación de cálculos renales y favorece a la digestión.

Limpia nuestro paladar y evita las caries

Sus propiedades astringentes combaten las bacterias bucales y frenen los estreptococos y bacterias vinculadas a las caries.

Protege contra las quemaduras solares graves

Los flavonoides, que se encuentran en las uvas y el vino, ayudan a reducir los efectos perjudiciales de los rayos ultravioleta en la piel.

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