Ver un salero relleno y de bonito aspecto: anuncia buenos consejos y decisiones beneficiosas.
Ver un salero en mal estado: indica malas gestiones en los negocios del durmiente.
Ver un salero volcado: contratiempos y disputas.
La sal de los sueños es generalmente un buen presagio, signo de satisfacciones. Solo la sal sucia y ennegrecida sería un mal signo y anunciaría enfermedades.