Alimentos y dieta recomendada para evitar el estrés otoñal

La alimentación juega un papel fundamental para combatir con éxito los síntomas que produce el estrés otoñal.

2m 18s
Nutrición Center
Con la llegada del otoño, la ansiedad, el nerviosismo, la irritabilidad o el estrés, pueden aumentar sin que te des cuenta debido a la disminución de horas de sol y el cambio de hora. A fin de combatir estas incómodas sensaciones resulta de gran ayuda seguir una dieta equilibrada en nutrientes, la cual debe sustentarse en un consumo óptimo de hidratos de carbono complejos, vitaminas y minerales.

Las dietas hiperproteicas a las que no pocos se han aferrado en las últimas semanas para deshacerse de los kilos de más que deja el verano son todo lo contrario a lo que nuestro organismo demanda en esta época. Además, el rápido descenso de peso que provocan va asociado en muchas ocasiones a un incremento del cansancio y a una notable pérdida de vitalidad y energía, haciéndonos caer en la denominada astenia otoñal.
Gtres
Los expertos en nutrición de Adelgar nos proponen mantener una dieta variada en la que no falten los hidratos de carbono complejos y las frutas frescas para bajar de peso sin ver reducida nuestra energía y evitar así bajadas de azúcar, gastritis o molestias estomacales.

Un equilibrio ideal de nutrientes durante el día sería de un 50-55% de hidratos, un 30-35% de grasas y un 15% de proteínas, teniendo en cuenta que para perder peso es recomendable prescindir de los hidratos de absorción rápida (azúcar blanca y harinas refinadas, por ejemplo) y apostar por los alimentos con fibra, cereales integrales, frutas y hortalizas.

Por ejemplo, para una dieta de 2.000 calorías la proporción que deberíamos tomar de estos nutrientes sería de 1000-1100g de hidratos de carbono, de 600-700g de grasa y de 300g de proteínas incluidas vegetales y animales.

Gtres
En lo que respecta a la repartición de los distintos nutrientes durante el día, el desayuno otoñal deber ser sano y energético, donde no falten los hidratos de carbono, en forma de pan (a ser posible integral) o cereales. En la comida, una o dos veces por semana podemos optar por la pasta o el arroz, evitando todo tipo de patata que no sea cocida o asada, mientras que para la cena debemos recurrir a verduras (siempre cocinadas) y carne o pescado a la plancha. A media mañana y media tarde lo ideal es tomar una pieza de fruta o un lácteo descremado.
Temas relacionados  ››