Los profesionales médicos de todo el mundo coinciden en que no existen fórmulas mágicas para perder peso, pero aún no se ponen de acuerdo en cuál es la mejor manera de eliminar los kilos no deseados de una forma saludable y que no suponga grandes sacrificios, pues de lo que se trata es de disfrutar en la mesa y no recuperar el peso perdido. Resumimos y damos un repaso a las dietas más populares, para que sepas como funcionan y puedas decidirte por la que más se adapte a tus necesidades.
Propuesta creada por "Barry Sears", desarrolla una nueva forma de comer que ayuda al paciente a elegir los alimentos que permitirán estar en lo que él llama la "Zona" y así, perder peso con total garantía.
Se basa en llevar una dieta equilibrada en la que hidratos de carbono, proteínas y grasas se encuentran rigurosamente controlados dentro de cada comida, y manteniéndose en la "Zona" se tiene acceso a las reservas de grasas acumuladas como fuente de energía en lugar de a los hidratos de carbono acumulados.
Este sistema evita que los niveles de azúcar en sangre se alteren. Los hidratos de carbono que permite esta dieta son aquellos cuyo índice glucémico (velocidad a la que son transformados en glucosa) es bajo, es decir, frutas, verduras, legumbres y cereales integrales.
Las proteínas permitidas por su absorción lenta son el tofu, las legumbres, las carnes de pollo y pavo, los pescados azules, yogures y leches fermentadas.
Las grasas se obtienen del aceite de oliva, aceitunas y mayonesa.
¡Consejo!
Por equilibrado que prometa ser el método de adelgazamiento, no olvides practicar analíticas básicas cada cierto tiempo y consulta al especialista.
Este método de adelgazamiento nace en Japón y sus bases radican en equilibrar la parte física y emocional a través de la armonía en la dieta.
Divide los alimentos en Ying y en Yang. Los primeros tienen una energía fría y debilitadora (azúcar, miel, leche, quesos, carnes, pescados, huevos, frutas y algunas verduras como la patata, la berenjena, el tomate o la remolacha).
Elimina de la dieta todos los productos refinados e introduce algas marinas como parte del menú diario.
Este sistema de alimentación es arriesgado, ya que favorece la pérdida de masa muscular al eliminar la ingesta de proteínas animales, pudiendo desembocar en una anemia debido a una deficiente absorción de proteína, además de que podria producir trastornos de tipo metabólico.
¡Consejo!
Es una de las dietas en las que se hace imprescindible acudir a un especialista para que controle los niveles de hierro y vitaminas.
Se trata de una dieta proteica cuyo fin es enseñar al paciente a controlar de por vida el consumo de carbohidratos para mantener el peso ideal.
Consta de 4 etapas, la primera llamada de "inducción" es la más severa y se mantendrá durante dos semanas, en ella se elimina drásticamente el consumo de carbohidratos con el fin de que el cuerpo comience un proceso de lipólisis que permitirá al metabolismo conseguir energía a partir de las grasas almacenadas.
Una vez concluidas las 2 primeras semanas de inducción se continuará dicho proceso incorporando paulatinamente carbohidratos bajos en hidratos de carbono y de bajo índice glucémico.
¡Consejo!
Es muy importante consultar al especialista antes del comienzo de la dieta y sobre todo realizar análisis periódicos.
Creada por el cardiólogo "Arthur Agatson" se basa en los mismos principios que las dietas bajas en carbohidratos, es decir, los limita para mantener una tasa de insulina constante en sangre y evitar el círculo vicioso por el que el cuerpo genera hambre y deseos de comer más carbohidratos.
En su primera fase de quince días de duración se controlará la ansiedad por comer de manera irracional a través de la limitación de una gran parte de los alimentos con hidratos de carbono.
En su segunda fase se reintroducirán los carbohidratos buenos.
La tercera fase se concebirá como una opción dietética muy saludable cuyo objetivo es seguirse de por vida.
¡Consejo!
Dieta sencilla de seguir y flexible, con muchas probabilidades de éxito.
Siempre es recomendable efectuar analíticas completas antes y durante la dieta.
Dieta vegetariana estricta basada en el consumo crudo de los alimentos, a lo sumo, al vapor, hervido o en el horno a muy bajas temperaturas ya que se considera que al cocinarlos se pierden parte de las propiedades nutricionales y se destruyen las enzimas que cada alimento contiene de forma natural para favorecer la digestión.
No obstante, expertos en nutrición afirman que el organismo está dotado de sus propias enzimas para digerir los alimentos y que no necesita las que están presentes en ellos, señalando además que si los alimentos no fueran bien digeridos la consecuencia sería una pérdida de peso, no un aumento.
Se excluyen los huevos, lácteos, carne y pescado, optando por la avena, cebada, soja y todo tipo de vegetales.
¡Consejo!
Al tratarse de una dieta vegetariana lo ideal es seguirla con el consejo de un experto en la materia para tratar de suplir las posibles carencias nutricionales que podría generar el seguimiento de la misma.
Dietas disociadas hay muchas y aunque difieren unas y otras, todas son propuestas dietéticas en las que no mezclan en una misma comida hidratos de carbono y proteínas.
Una de las ideas que basan este tipo de dietas es que cada uno de los grupos alimenticios requieren durante su digestión un PH diferente en el estómago.
Las frutas generalmente se recomiendan tomar fuera de las comidas no mezclando ácidas y dulces.
Las ventajas que nos reportan estas dietas es que son fáciles seguir y no requieren sacrificios importantes, igualmente no es necesario el conteo de calorías y remite la ansiedad.
Los pacientes que las siguen perciben una importante mejoría en sus digestiones dado que la separación de hidratos de carbono y proteínas evita determinadas fermentaciones en el estómago que pueden generar hinchazón abdominal y retención de líquidos.
Los resultados en estas dietas suelen ser notables a corto plazo aunque están enfocadas a ser mantenidas de por vida como un hábito alimenticio más que un régimen para perder peso en una situación puntual.
A pesar de que no existen limitaciones en los alimentos a consumir, conviene realizarse las analíticas periódicas recomendadas por el especialista a fin de verificar que nuestro organismo está recibiendo la energía y nutrientes necesarios.
Ante todo, recuerda que la clave para perder peso es estar mentalmente preparado para seguir un método de adelgazamiento y encontrar una opción alimentaria que te haga disfrutar en la mesa y perder peso con salud.