Este delicioso plato con sabor italiano no es difícil de preparar, sin embargo es necesario conocer algunas claves indispensables para que el resultado sea perfecto. Además, te damos algunas ideas para disfrutar de una comida o cena a la italiana con el risotto como protagonista. ¡Triunfarás!
Aunque varía mucho del gusto y preferencias del consumidor, un buen risotto lleva cebolla, mantequilla, vino blanco, sal, caldo, arroz, queso parmesano reggiano rallado y aquello que le quieras añadir que le dará un sabor especial al arroz, sea foie, setas, pescado... aunque en Italia realmente lo comen sin ingredientes añadidos, con el arroz y el sabor cremoso del queso.
Primeros pasos
Iniciaremos la receta de risotto introduciendo en una olla o sartén un par de cucharadas de mantequilla y fina cebolla que habremos picado anteriormente hasta que quede bien dorada. A continuación, añadiremos el arroz, removeremos y agregaremos caldo o bien vino blanco.
Arroz en su punto
Seguidamente y, a medida que el arroz absorbe el líquido pasados unos 20 minutos, le podemos añadir aquellos ingredientes que habíamos escogido, tales como el foie o las setas. Es importante saber cuándo mezclar tales ingredientes porque, por ejemplo, no podemos incorporar el pescado al principio porque el risotto quedaría seco.
Cuando el arroz está bien cremoso, es el momento de volver a poner mantequilla y el queso parmesano reggiano rallado para mezclarlo junto al arroz. Debe quedarnos un arroz cremoso, en su punto, ni muy hecho ni crudo. El proceso de elaboración completo del risotto puede tardar unos 45 minutos, si tardamos menos realmente veremos que no está bien hecho... ¡A disfrutar!
Gtres
Consejos para una buena receta
La clave para obtener un buen risotto está en que el arroz no se pase. Para ello, tendremos muy presente los minutos del reloj y lo podemos ir probando para comprobar cómo está saliendo. El truco es sacar el arroz cuando está casi hecho, pero no del todo. Y aunque creemos que va a salir crudo, deberemos sacarlo de la olla con antelación porque si se nos pasa, ya no hay nada que hacer. Es algo parecido a cuando cocinamos pasta y debe estar "al dente", con el punto de cocción óptimo.
También es destacable mezclar todo el arroz con el queso y el vino que vamos añadiendo cuidadosamente. Y, como hemos apuntado anteriormente, en caso de que queramos mezclar ingredientes saber cuándo los hemos de incorporar al arroz.
Ideas para una comida o cena italiana
Aunque el risotto sea el claro protagonista de nuestra cena, para que todavía tenga más sabor a Italia, podemos empezar con unos aperitivos o antipastis: Ensalada de queso con mozzarella de Búfala y orégano, crostinis (pequeñas tostas de pan con tomate troceado, pasta de hígado de ave...), y embutido típico italiano como el speck, jamón de cerdo ahumado o la bresaola, finas lonchas de carne de ternera curadas. No te olvides de un buen tinto o blanco italiano y del rico tiramisú para el postre.
