Preparar una auténtica hamburguesa casera americana requiere de unos principios claros y sencillos que muchos olvidan cuando se ponen delante de los fogones. Las combinaciones de ingredientes son infinitas, pero todas deben guardar un denominador común si se quiere preservar la esencia de las hamburguesas.
Para conseguir el punto perfecto en cada receta, New York Burger, pioneros en introducir el concepto de hamburguesa gourmet, nos dan los trucos básicos para cocinar la hamburguesa perfecta:
Acude a tu carnicero de confianza y pide materia prima de primera calidad y un corte perfecto. Una buena picada potencia el sabor al tiempo que se consigue una melosidad agradable en boca.
Agencias
Evita el empleo de sartenes para “freír”, ya que siempre se logra un mejor resultado a la parrilla. Si no tenemos parrilla en casa o barbacoa, siempre podemos usar una sartén con base dentada que hace las veces de parrilla y preserva el sabor de la carne.
Existen muchos panes para todos los gustos, desde integrales, con semillas de sésamo o amapola, focaccia acompañada de romero y aceite o hasta de cereales, pero todos tienen que tener una miga blanda que se empape del jugo de los ingredientes de la hamburguesa y que permita que éstos se entremezclen.
Frescor y dulzor, las máximas que se buscan al añadir vegetales a una buena hamburguesa. Un básico siempre ha sido la cebolla. A la plancha, cruda, caramelizada, morada o chalota… También disponemos de opciones más exóticas como el aguacate, en formato guacamole, o de una salsa casera de arándanos o frutos rojos, que combinan muy bien con quesos con cuerpo.
New York Burger
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El queso es el acompañante de primer nivel de la hamburguesa. Incluir una rebanada de queso americano genera untuosidad, pero con la gran oferta que existe en el mercado cualquier combinación es válida. Desde un queso de sabor más intenso como el azul o parmesano hasta uno más suave como philadelphia o mozzarella.
Emplear kétchup, mayonesa, barbacoa o mostaza siempre ayuda a potenciar el sabor de los ingredientes de la hamburguesa. No obstante, hay que agregarlos de forma racional, ya que un uso excesivo de la salsa puede homogeneizar todos los sabores y perder la esencia de la receta.
Preparar una verdadera hamburguesa americana requiere de unos principios claros y sencillos que muchos olvidan cuando se ponen delante de los fogones. Las combinaciones de ingredientes son infinitas, pero todas deben guardar un mínimo denominador común si quieren preservar la esencia.
Acudir al carnicero de confianza y pedirle materia prima de primera calidad es tan importante como su corte. Una buena picada potencia el sabor al tiempo que se consigue una melosidad agradable en boca.
Si no tenemos en casa parrilla o barbacoa, siempre podemos usar una sartén con base dentada que hace las veces de ésta y preserva el sabor de la carne. Ante todo, destierra las clásicas sartenes si quieres preparar una auténtica hamburguesa americana.
Frescor y dulzor, las máximas que se buscan al añadir vegetales a una buena hamburguesa. Un básico siempre ha sido la cebolla. A la plancha, cruda, caramelizada, morada o chalota... También disponemos de opciones más exóticas como el aguacate, en formato guacamole, o de una salsa casera de arándanos o frutos rojos, que combinan muy bien con quesos con cuerpo.
