Cuando hablamos de cuidado dental no sólo nos referimos al cepillado de los dientes, al uso del hilo dental o acudir regularmente a la consulta del dentista, también una adecuada alimentación es tanto o más importante.
Cada vez que damos un bocado, se desencadena un proceso químico en el interior de la boca y, en función del tipo de dieta, tendrá una repercusión en la salud general y dental.
Los alimentos ricos en azúcares son los principales causantes de la caries. Estos hidratos de carbono (azúcares) reaccionan con bacterias bucales para formar ácido, que es el causante de que desmineralice el esmalte dental, hasta producir la tan temida caries.
Hemos de tener en cuenta que los azúcares no sólo se encuentran en bombones o "golosinas", sino que las bebidas tipo batidos o zumos son una gran amenaza porque, aunque no contengan azúcares, suelen tener un alto contenido de ácidos, que desgasta los dientes. Lo que es una hábito saludable, por ejemplo, es comer mucha fruta y verdura (al menos, 5 piezas al día), pero el consumo excesivo de estos alimentos, que contienen azúcares naturales, puede causar erosión del esmalte dentario. Por lo tanto, no es tan sencillo como comer sano.
Nuestro punto a favor es que es sencillo contrarrestar "el ataque ácido". "Lo peor que puedes hacer después de beber un batido, comer una ensalada o un alimento rico en ácidos es cepillarte los dientes, porque daña aún más el esmalte". Debemos esperar, al menos, media hora, afirma el Dr. Iván Malagón. "Lo que sí es recomendable es enjuagarse con agua o beber leche, para contrarrestar esa posible desmineralización".
La revista Journal of Periodontology publicó un estudio realizado en Japón que demuestra que los antioxidantes del té contribuyen a que nuestras encías se mantengan sanas.
El estudio se llevó a cabo con hombres de edades comprendidas entre los 49 y 59 años. Los investigadores analizaron a 940 hombres en búsqueda de alguna enfermedad o problema en las encías.
El test que tuvieron que responder los 940 hombres que se prestaron a hacer el estudio abarcaba preguntas sobre las costumbres diarias de los mismos, cosas como consumir alcohol, fumar, el tiempo que empleaban para lavarse los dientes, etc. Sin embargo los investigadores llegaron a una conclusión nada esperada, observaron que la probabilidad de desarrollar enfermedades en las encías era inversamente proporcional al consumo de té.
Los autores del estudio finalmente concluyeron que el té verde resultaba bueno para las encías por su alta concentración en unos antioxidantes llamados polifenoles. Pero ddemás de los polifenoles, el té verde contiene otro compuesto antioxidante llamado catequina, que ayuda a la salud de las encías por su capacidad de reducir la inflamación. La catequina frena el desarrollo de la enfermedad periodontal, que es una dolencia crónica inflamatoria de las encías y del hueso, asociada a enfermedades cardiovasculares y a la diabetes.
Uno de los odontólogos más reconocidos de nuestro país, el doctor Iván Malagón, afirma que los polifenoles del té inhiben los gérmenes que producen la enfermedad de las encías. "Uno nunca sabe dónde puede encontrar nuevos amigos, y en este caso queda claro que el té verde es un gran aliado de nuestra salud bucal. Así que nos conviene "orientalizarnos" y tomar una taza de té al menos una vez al día", recomienda el experto.
Desde hoy ya sabemos que el té verde es nuestro gran aliado para prevenir posibles problemas y enfermedades en nuestras encías, ejerciendo un efecto protector de la salud y belleza de los dientes.
Ya en el año 2008 nos sorprendió la noticia que informaba que el área de Genómica y Salud del Centro Superior de Investigaciones en Salud Pública (CSISP) de Valencia había anunciado que estaba desarrollando un yogur anticaries tras aislar un "inhibidor" de la bacteria que provoca esta enfermedad dental y que funcionaría de manera equivalente a como lo hace la bacteria del bífidus activo.
Las nuevas noticias nos devuelven al mundo de los lácteos, ya que se acaba de publicar un estudio en la revista Academy of General Dentistry que certifica que el queso previene la caries. Tras medirse el pH -que es un indicador importante del desgaste dental- de los participantes en el estudio, se les ofreció por grupos queso, leche y yogur. La sorprendente conclusión fue que si bien los sujetos que habían tomado leche y yogur mantenían los niveles de pH, los que habían consumido queso mostraban un aumento en los niveles de pH.
La conclusión del estudio es sencilla: el queso tiene propiedades anticaries.
Según el prestigioso odontólogo Iván Malagón, "parece claro que el queso aumenta la salivación más que otros alimentos y que además la acción de sus componentes se adhieren al esmalte de los dientes protegiéndoles de la acción destructiva del ácido". Así ,el queso ya no es solo un delicioso remedio para combatir el mal aliento, sino que además, consigue contrariar los ácidos de las comidas y balancear eficazmente el pH para prevenir la caries.
El doctor Malagón además incide en que es una noticia que ha sorprendido y que es muy positiva, ya que "las caries influyen sobre otro tipo de patologías como el cáncer gástrico y otras enfermedades como la úlcera de estómago".
No lo dudes, tu postre perfecto para presumir de sonrisa puede ser un trozo de queso y una infusión de té verde. ¿Te apuntas?