Hoy, 18 de octubre se celebra el Día Mundial de la Menopausia, ese ciclo natural en la vida de la mujer en el que se producen una serie de cambios hormonales que desembocan en un descenso en el nivel de estrógenos.
Con el envejecimiento relativo de la población en las zonas consideradas del "Primer Mundo", la menopausia será una palabra muy utilizada, ya que a partir de los datos facilitados por la Organización Mundial de la Salud (OMS), se ha estimado que cuando lleguemos al año 2030, el número de mujeres con más de 50 años superará los mil millones.
Algunas de las consecuencias de este estado son: asfixias, osteoporosis, mareos, sudores, vértigos, sequedad vaginal, obesidad, y los inevitables cambios emocionales. Dichos cambios a nivel hormonal son causantes de un desequilibrio que puede llegar a comprometer la salud dental, modificando las encías, la mucosa oral y el hueso dentario, lo que puede provocar alteraciones en la forma y color de los dientes e incluso la pérdida de los mismos.
"El descenso de la producción de hormonas durante la menopausia puede provocar problemas en las encías, en la mucosa bucal y en el hueso que sostiene los dientes. En ese momento hay que ser más cuidadosos con la higiene bucal, ya que de lo contrario estos cambios pueden causar muchos problemas como la pérdida del color de los dientes o sequedad en la boca, entre otros", informa el doctor Malagón, uno de los odontólogos más reputados de nuestro país.
Los problemas dentales más comunes asociados a la aparición de la menopausia son la Gingivitis Descamativa, Síndrome de la Boca Ardiente, que puede provocar problemas al hablar y variar el sentido del gusto, y la Xerostomía, que se caracteriza por la sensación subjetiva de sequedad en la boca por mal funcionamiento de las glándulas salivales.
Con el objeto de proteger la salud de los dientes durante esta etapa, desde Vitaldent nos avisan de algunas de las patologías más frecuentes:
Además, investigadores de la Universidad de Harvard (EE.UU) han descubierto que las personas que sufren de gingivitis poseen entre un 30% y un 50% más de probabilidades de desarrollar cáncer en la sangre, en el hígado o en el páncreas. La culpa puede atribuirse a la inflamación excesiva causada por una infección oral, que no sólo aumenta el riesgo de padecer cardiopatías, sino que también propicia la aparición del cáncer.
La mejor forma de cuidar tus encías es el uso diario de la seda dental, además de visitar a tu dentista periódicamente.
La prevención es fundamental y el control de la placa resulta prioritario. Para ello es necesario ingerir una gran cantidad de líquidos, sobre todo agua, y realizar una exhaustiva limpieza dental con pasta dentífrica fluorada complementada con el uso de un antiséptico que combata los microorganismos orales, así como el hilo dental especialmente antes de acostarse.
Como consejos recomendables para lucir durante mucho tiempo una bonita sonrisa, el doctor Malagón nos propone usar de manera correcta el hilo dental, realizar un cepillado riguroso y usar enjuagues bucales, tomar líquidos hasta alcanzar en torno a los 2 litros diarios como mínimo para hidratar la boca de manera correcta, y que a la hora de utilizar medicamentos o tomar algún caramelo, se elijan siempre los que no contengan azúcar.
Periódicamente se deberá acudir al dentista para que un profesional valore el estado general de la boca y pueda detectar y tratar los diferentes problemas a tiempo.