¿Dientes blancos y sonrisa diez? Consíguelo con el cepillado dental perfecto
Saber cuidar la salud de tu boca es fundamental para estar guapa y lucir una sonrisa atractiva y perfecta, siendo el cepillado dental, la clave para conseguir una boca irresistible, sana y fresca. Ficha la guía definitiva para cepillarse bien los dientes cada día y presume de sonrisa ¡diez!
Lucir una sonrisa brillante, blanca y sana es la clave para verte guapa y joven. Tanto el cepillado como el buen uso del cepillo es fundamental para prevenir enfermedades en dientes y encías, logrando una salud bucodental completa. Sin embargo, con frecuencia se pueden cometer errores que impedirán lucir una dentadura brillante.
Las cosas más complicadas pueden resultar a veces sencillas y las fáciles se pueden convertir en nudos imposibles de desatar. El cepillado dental se encuentra en ese espacio de lo que parece simple pero que tiene una serie de normas y consejos que hay que seguir para hacerlo correctamente.
Desde niños tenemos la costumbre casi genética de cepillarnos los dientes en sentido horizontal. En el imaginario colectivo está la imagen de un padre que guía la mano de su pequeño para que éste mueva el cepillo lentamente y de arriba abajo. Es un clásico que todos hemos vivido en alguna ocasión: una de esas enseñanzas que pasan de padres a hijos.
Con la ayuda de los expertos de Clínica Sicilia, te ofrecemos la guía definitiva del cepillado dental, para que de una vez por todas, puedas presumir de sonrisa diez:
Utiliza un enjuague bucal antes del cepillado para disminuir la carga de bacterias en la boca y por consiguiente reducir los microorganismos que terminan en las cerdas tras el cepillado. En su defecto, enjuaga la boca con agua, ya que este proceso hace que se reblandezcan los depósitos de calcio de la saliva y la comida acumulada.
Cepíllate los dientes con regularidad y después de cada comida, especialmente importante cuando se padece algún tipo de enfermedad periodontal, ya que las bacterias que se alojan en la boca pueden entrar en el flujo sanguíneo durante las actividades diarias, como comer, masticar chicle o cepillarse los dientes. Lo recomendable es cepillar los dientes al menos dos veces al día, una por la mañana y otra por la noche.
Para cepillar correctamente los dientes, realiza movimientos cortos y suaves, prestando especial atención a la línea de las encías. Coloca el cepillo a lo largo de la encía, de forma que los filamentos penetren entre los dientes y la encía. Cepilla con suavidad todas las superficies externas e internas desde la encía hacia el diente y, seguidamente, las caras masticatorias con pequeños movimientos de vaivén. Dos minutos serán suficientes para acabar con la placa bacteriana si no llevamos prótesis o aparatos de ortodoncia.
Cepillar la lengua con asiduidad ayuda a acabar con la placa bacteriana, que es la causa del mal aliento.
Nunca intercambies o compartas el cepillo de dientes, pues esto también significa compartir las bacterias, incluyendo aquellas que causan caries y enfermedades periodontales. Además, si has estado enferma, cambia tu cepillo de dientes una vez te hayas recuperado.
Evita a toda costa guardar el cepillo de dientes en un lugar húmedo, ya que favorece el crecimiento de microorganismos. Lo ideal es tener los cepillos de dientes en un sitio seco, en posición vertical y al descubierto para dejar que se sequen perfectamente hasta el próximo uso.
Tras el cepillado, asegúrate de enjuagar a fondo los cepillos de dientes con abundante agua, siendo recomendable empapar con enjuague bucal antibacterias. Así eliminarás todos los restos de pasta de dientes y de comida que hayan quedado atrapados entre las cerdas, reduciendo el nivel de bacterias.
Si has comprado un nuevo cepillo de dientes, se debe limpiar antes de estrenarlo, pues cabe la posibilidad de que existan microorganismos antes de comprarlo o de retirar el cepillo del empaque.
La duración de un cepillo de dientes es variable, aunque por muy bien cuidado que esté, tiene un periodo de vida útil de entre tres y cuatro meses. Un indicativo de que es hora de cambiarlo es cuando las cerdas del cepillo están abiertas. Elige un cepillo de cerdas suaves o medias y el cabezal pequeño. Se recomienda el cepillo eléctrico.
Evita mezclar varios cepillos en un mismo recipiente. Conviene almacenarlos por separado a fin de prevenir la contaminación cruzada.
¡Importante! Jamás se debe sustituir el cepillado por el enjuague con colutorios: es recomendable el uso de enjuagues bucales, siempre como complemento a un correcto cepillado, pero no se debe abusar de ellos ya que pueden resultar muy agresivos para la boca. Además, no debemos cepillarnos los dientes justo después de consumir alimentos o bebidas ácidas, porque el ácido desproteje el esmalte dentario y al cepillarnos podríamos desgastar la superficie de los dientes.
En el hipotético caso de que no pudiéramos lavarnos los dientes, masticar chicle sin azúcar limita moderadamente el ataque de los ácidos.
Cómo elegir el cepillo de dientes perfecto para ti
Despejamos las incógnitas y te ayudamos a elegir el cepillo ideal para mantener una sonrisa perfecta:
El espacio interdental. Si tus dientes están algo separados debes usar cepillos con filamentos gruesos capaces de llegar a todos los huecos.
El masaje de encías. Si tus encías sangran frecuentemente, necesitas masajearlas a la vez que te cepillas con cerdas de goma. Estimulan la zona y son mucho menos agresivas.
Adiós a la placa. Los cepillos con vibración y almohadillas de plástico consiguen adaptarse perfectamente al contorno de los dientes y barren literalmente la placa que se aloja en el borde de las encías.
Contra la halitosis. Si sufres halitosis debes eliminar los gérmenes con un cepillado de lengua. Elige un cepillo para dientes y lengua.
Si tienes ortodoncia… Usa cepillos con cerdas largas para que puedan introducirse fácilmente entre el arco y los dientes. Además, utiliza un cepillo single circular, te servirá para limpiar los braquets uno a uno. No olvides pasar la seda dental alrededor de ellos para eliminar cualquier posible resto de comida.
¿Cómo usar correctamente el hilo dental?
Una boca sana requiere de un cepillado correcto y eficaz que debe ser complementado con el uso del hilo dental, ya que permite limpiar eficazmente las superficies entre los dientes, donde el cepillo tiene más dificultad en llegar.
Te contamos en 6 pasos cómo utilizar el hilo dental para conseguir una limpieza profunda de tu boca:
Corta unos 45 cm de hilo dental y enróllalo casi totalmente en el dedo medio de una de tus manos.
En el dedo medio de la otra mano, enrolla un poco de hilo, dejando cerca de 12 cm entre las manos.
Desliza el hilo dental suavemente entre los dientes hasta alcanzar la línea de la encía.
Curva el hilo dental formando una "C" alrededor de cada uno de los dientes y deslízalo suavemente hacia arriba y hacia abajo.
Repite el procedimiento en todos los espacios interdentales.
El hilo dental debe utilizarse cada día antes de acostarse. El momento idóneo es antes del cepillado de después de cenar.
Consejos para que los niños se cepillen bien los dientes
Muchas son las dudas que surgen a los padres primerizos sobre los primeros cuidados dentales en la etapa infantil. El doctor Jaime Jiménez, especialista en odontología, nos explica que "los dientes deben cepillarse desde que salen ya que lo importante es que la placa bacteriana no se adhiera sobre el diente. En el caso de los niños más pequeños, es suficiente frotar con una gasa para quitar esta capa que se forma cuando comemos para evitar que se calcifique y pueda causar caries".
Y es que, entre el 60 y el 90 por ciento de los escolares de todo el mundo tiene caries dental. Es por ello que los dentistas recomiendan a los padres realizar la higiene bucal de los bebés incluso antes de que aparezcan los primeros dientes paraevitar así la acumulación de bacterias y la aparición de enfermedades bucales.
La caries es la enfermedad bucodental más habitual, tanto en niños como en adultos."Además de la caries, la enfermedad periodontal y las maloclusiones son otros de los problemas bucodentales más prevalentes en niños",explica Karen Romero, Especialista Odontopediatra de PHB.
El retraso en la edad de inicio de la higiene bucodental puede implicar problemas en el futuro. La salud de los dientes de leche influye directamente sobre los dientes de los adultos. "Si un diente de leche se ve afectado por caries y se produce su pérdida, se puede favorecer que las bacterias afecten a dientes definitivos; se pierde la guía o camino que debe seguir el diente permanente para su aparición en la boca y se altera el espacio disponible en la arcada dentaria, lo que puede causar mala posición de los dientes",explica Karen Romero.
Expertos en salud bucal recomiendan como consejo tener en cuenta las características que hacen que un cepillo de dientes sea apto para los niños: el tamaño del mango y del cabezal debe ser proporcionado a la edad, para que el cepillo se pueda manipular con facilidad y eficacia. Además, los filamentos deben ser suaves con las puntas redondeadas para que el cepillado pueda realizarse correctamente y sin producir ningún daño.
En lo que respecta a los enjuagues, se pueden empezar a utilizar una vez el niño aprende a no tragárselos y a partir de los 12 o 13 años, una vez que el niño tenga los dientes definitivos, se recomienda hacer una limpieza bucal cada seis meses.
Otra de las consultas habituales en la edad infantil es sobre el frenillo labial superior cuando provoca la separación de las piezas dentales. El Dr. Jaime Jiménez recomienda eliminarlo para evitar problemas, no sólo estéticos sino también de encaje en la mandíbula. La ortodoncia, si es necesaria, puede implantarse a partir de los siete u ocho años.