Dedicar unos minutos a observar frente al espejo la forma de tu óvalo facial es la clave para saber qué estilo de peinado es el que te sienta mejor y qué sencillos trucos pueden ayudarte a disimular las pequeñas imperfecciones como por ejemplo una barbilla demasiado afilada, unos pómulos muy marcados o una frente algo ancha.
Es fácil. El volumen y la longitud de tu cabello juegan un papel determinante a la hora de equilibrar el rostro y darle armonía a tu imagen de conjunto. Existen muchos tipos de arreglos para tu melena como los peinados para cabellos ondulados, fáciles, rápidos y ¡en tendencia!
Si tienes la cara redondita, debes controlar especialmente los volúmenes. El cabello rizado o con ondas muy marcadas no es lo que mejor te sienta. Te favorece una media melenita lisa o ligeramente ondulada y en forma de corte a capas, que "aligeren" el rostro, dándote movimiento y soltura pero sin sobrecargar. Si te gusta el flequillo, puedes llevarlo, pero nunca demasiado corto. Mejor ladeado o con forma irregular (efecto "sierra") y con las puntas marcadas (para dar verticalidad a tu cara). Otra buena idea a la hora de elegir un peinado perfecto para ti es llevar la melena a la altura de los hombros, en liso y con los laterales desfilados (mechones a distintas alturas). Peina las puntas de esos mechones hacia adentro (enmarcando la cara) para "romper" así las formas redondeadas de tu óvalo facial. Entre tus peinados a evitar están los recogidos altos y tirantes y el estilo bob.
Las facciones muy marcadas, con protagonismo de la frente y del mentón, es lo que caracteriza a los rostros cuadrados. Si este es tu caso, puedes suavizar las líneas de tu cara con peinados en los que predominen las curvas. Una melena ondulada o con ondas deshechas te irá muy bien. Vigila el largo. Nunca lleves el cabello justo a la altura de la mandíbula porque, así, le darías protagonismo extra. Puedes también dar algo de volumen en la parte superior (siempre que tu rostro no sea, además, alargado, tipo rectángulo). Un recogido deshecho, con mechones laterales ondulados también te resultará favorecedor. En tu caso, la coleta alta o baja, lisa y estirada, no es lo que mejor te sienta.
Puedes equilibrar la forma de tu rostro jugando con los volúmenes. Por ejemplo, si tienes un rostro triangular, más estrecho por arriba y más ancho en la zona de la mandíbula, prueba a llevar peinados que aporten volumen extra en la zona de las sienes. Un corte juvenil, con amplias ondas desestructuradas y que llegue a la altura de las orejas (media cara) te va como anillo al dedo. Si por el contrario tu cara tiene forma de diamante o corazón (pómulos marcados y barbilla afilada), llena con tu cabello la zona del cuello. Una larga melenita a capas (más descargado por arriba y con volumen en medios y puntas), o un original recogido bajo en forma de "banana", que sobresalga a ambos lados de la nuca son dos ideas acertadas para sacar partido a tus facciones.
Si tienes el rostro alargado y quieres acortarlo visualmente, el flequillo puede ser un buen aliado. Llévalo a media frente y recto (formará una línea horizontal que te favorecerá). En tu caso, dale cuerpo (ondas) a tu cabello para que tu cara no resulte tan "estrecha" y no abuses del largo (mejor media melena).
Otro truco si tienes la cara menudita es llevar peinados que no contribuyan a taparte aún más. Te quedarán muy bien los cortes tipo pixie o garçon. Fíjate en tus propias características y haz de tu cabello el mejor aliado para sacar partido a tu rostro.
Si al igual que Paula Echevarría tienes un rostro en forma de corazón, es decir, pómulos marcados y barbilla afilada, opta por llenar con tu cabello la zona del cuello. La mejor opción es una melena a capas, con volumen en medios y puntas.
Si tu rostro es alargado,nada mejor para acortarlo visualmente que optar por un flequillo a media frente y recto. Otra opción, es darle cuerpo a tu cabello mediante ondas, como hace Gwyneth Paltrow.
Cuando hablamos de peinados para caras redondas, hay que prestar atención a los volúmenes. El cabello rizado no es un buen aliado para este tipo de rostros, así es que, elige mejor una media melenita lisa o ligeramente ondulada, como la de Jennifer Lawrence.
Hillary Duff tiene un rostro en forma de diamante, por eso, escoge una larga melena a capas, con volumen en medios y puntas para sacar el máximo partido posible a sus facciones.
Renée Zellweger también tiene una cara redondita, por eso, la actriz de Hollywood apuesta por la media melena lisa que le ayuda a aligerar su rostro, dándole movimiento y soltura pero sin sobrecargar.
El rostro de Jessica Alba en forma de corazón le reclama a gritos una melena larga a capas descargada por arriba y con volumen en medios y puntas. Además, la actriz suele apostar también por recogidos bajos, que equilibran a la perfección sus facciones.
Los rostros cuadrados son aquellos en los que la frente y el mentón tienen el protagonismo, por eso, nada mejor para suavizarlos que elegir un peinado en el que predominen las curvas. Las melenas onduladas o con ondas deshechas son una elección perfecta.
Uno de los mejores trucos para las que tienen la cara menudita es elegir peinados que no contribuyan a taparte aún más. Los cortes pixie o garçon como el de Anna Hathaway te sentarán de maravilla.
Para los rostros triangulares lo mejor es jugar con los volúmenes. Liz Hurley conoce este secreto, por eso, la actriz británica suele llevar peinados que le aportan volumen extra en la zona de las sienes.
No todos los peinados sientan bien a todas las mujeres, pues la forma de tu rostro es fundamental para saber qué peinado es el que va contigo. El volumen y la longitud de tu pelo juegan un papel determinante a la hora de equilibrar el rostro.