El maquillaje debe fundirse con la piel, estar en armonía con la edad y aplicarse de forma natural, con un resultado impecable, elegante. El maquillaje no es un juego con el que vencer el paso del tiempo, sino un aliado que realza la belleza y potencia las facciones. ¡Descubre el que te favorece!
Limpieza e hidratación son las principales bases de un buen maquillaje. Lo más importante para lucir buena cara es afrontar las arrugas y las pequeñas imperfecciones sin trauma alguno.
Pero más que utilizar el colorete, la máscara de pestañas, los lápices de los ojos, los polvos compactos y las barras de labios a discreción, sin tino, se debe de hacer una selección de los productos que más favorezcan y convertirles en cómplices. Eso sí, cada edad requiere unos colores y unos cosméticos determinados que favorezcan, que impidan salir a la calle con una máscara, disfrazada. La máxima del maquillaje es: menos es más.
Antes de aplicar el maquillaje, es necesario conocer los primeros auxilios de la piel, sin olvidar que cada edad requiere cuidados específicos. La disciplina y los buenos hábitos son las mejores armas para que el maquillaje siente sus bases.
Una alimentación equilibrada, ocho horas de sueño, ejercicio continuado, sol con protección, alcohol en contadas ocasiones y dos litros de agua garantizan una buena cara.
A LOS 15: DESCUBRE LOS COSMÉTICOS
Cuando el acné todavía está instalado en la piel, empiezas a descubrir los cosméticos de tu madre. Pero no debes de caer en el error de utilizarlos, no son los idóneos para tí.
La limpieza e hidratación son los mejores amigos para esta etapa. Si quieres realzar tu belleza, bastará con un ligero rubor de colorete sobre las mejillas y una pizca de máscara de pestañas para iluminar tus ojos.
A LOS 20 Y 25: AVERIGUA LO QUE MEJOR TE SIENTA
A estas edades la piel luce en todo su esplendor. No existen signos de envejecimientos ni señales que alerten de las primeras arrugas. Los tratamientos que se utilicen deben ir dirigidos hacia la prevención.
Jamás se debe de aplicar un fondo de maquillaje sin la hidratación adecuada ni tampoco se debe caer en el error de aplicar tratamientos demasiados nutritivos en una piel tan joven.
Para las más jóvenes Charo Palomo, del estudio de Michel Meyer aconseja "una base ligera o crema de color, mejor si tiene protección solar y polvos bronceadores. Un toque de colorete rosado-mandarina en el centro de las mejillas, brillo en los labios, máscara de pestañas y sombras de ojos que den fuerza a la mirada. Los tonos cálidos favorecen a las morenas, a las pieles doradas, a los ojos marrones y verdes, mientras que los tonos fríos sientan muy bien a las pieles más blancas, a las rubias, a los ojos grises y azules".
A LOS 30: MAQUILLAJE EXPRÉS
Es la edad de oro de la piel. La cosmética para esta edad tiene la misión de retener todo el capital de la belleza. Los expertos en belleza advierten de que el primer signo de envejecimiento no son las arrugas ni la pérdida de tonicidad, sino la alteración del tono de la piel que se vuelve opaco y gris.
Evita el rostro lavado, sólo favorece a las adolescentes. Si quieres borrar el cansancio del rostro, los estragos de una mala noche o las jornadas agotadoras de trabajo y no tienes demasiado tiempo, aplica iluminador antes de la base de maquillaje, el antiojeras en el contorno de los ojos y en las zonas hundidas del rostro como los extremos de la nariz.
Luego, aplica sombra de ojos. Evita los tonos violetas, morados, ciruelas y rosas intensos, si tienes ojeras. Te irán mejor los tostados y marrones. Termina tu maquillaje con máscara de pestañas, brillo en los labios y cepillado de cejas.
A LOS 40: FRESCURA EN EL ROSTRO
A esta edad el objetivo del maquillaje es añadir frescura al rostro y disimular las líneas de expresión y las manchas de la piel si se tuviera.
La piel a partir de los cuarenta necesita hidratación extra y un maquillaje fresco, suave. Escoge una base de textura ligera y disimula las manchas con uno o dos tonos de corrector más claro que tu tez y aplícalo antes que el fondo de maquillaje.
Realza las mejillas con colorete. Si tu tez es pálida prueba con un rosa y si es morena con un tono mandarina. No olvides maquillar tus labios con tonos intensos, siempre favorecen más a medida que se cumplen años.
DE 50 EN ADELANTE: DISIMULA LAS ARRUGAS
Está prohibido maquillarse como si se tuviesen treinta años y perder peso drásticamente, ya que la piel pierde toda la tersura y es imposible su recuperación. Los productos reafirmantes son los mejores aliados para atenuar las señales del paso del tiempo.
Evita los tonos llamativos. Después de aplicar una base de maquillaje untuosa y con un ligero brillo, espesa con un lápiz marrón oscuro o gris las cejas si empiezan a estar despobladas.
Para los ojos escoge tonos suaves y luminosos con acabado mate, los nacarados acentúan las arrugas de los párpados. A continuación, coloca un poquito de colorete sobre la mejilla y difumínalo hacia las sienes, iluminará tu tez. No salgas de casa sin pintar los labios y busca colores intensos y brillantes, proporcionan una cálida y atractiva sonrisa.