
Son una delicia y están en su punto. Cerezas y picotas son un regalo de la naturaleza que no puede faltar en nuestro menú durante estas primeras semanas de verano. Su alto contenido en agua y vitaminas las convierten en un aliado de salud y belleza al que hay que sacar el máximo partido. Su suave efecto diurético y laxante, elimina toxinas y líquidos, purificando en profundidad el organismo.
Además, las cerezas son ricas en provitamina A, vitamina C y hierro, ideal en épocas de sobreesfuerzo y para evitar anemias. Su gran contenido en potasio las convierte en aliadas de aquellas personas que padecen de hipertensión. También ayudan a reducir los niveles de ácido úrico y su consumo se relaciona con un menor riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares. Solas o formando parte de numerosos platos es el momento de descubrir todas sus posibilidades.
Este original "gazpacho" es un entrante perfecto para tomar bien fresquito.
Ingredientes:
Deshuesa las cerezas y trocea el pimiento y la cebolleta. Pon a macerar estos ingredientes en el tomate mezclado con el zumo de naranja. Deja reposar en nevera al menos 1 hora. Pasado este tiempo, incorpora el aceite, el vinagre y un puñado de pan remojado en agua fría. Tritura con batidora. Pasa por el chino o pasapuré para una textura más fina, cuela el resultado y conserva en la nevera hasta su consumo.
El secreto de este plato es la deliciosa salsa que da un toque de alta cocina a cualquier pieza de carne asada.
Ingredientes:
Para la salsa:
Pela y trocea las patatas en rodajas de grosor medio (serán el lecho para los solomillos), salpimenta y coloca en una fuente para horno. Envuelve cada solomillo con una tira de bacon (enrollándola y sujetándola con ayuda de un palillo). Colócalos sobre las patatas e introduce en horno precalentado a 200º. Los solomillos tardarán en hacerse unos 40-50 minutos.
Mientras, prepara la salsa poniendo las cerezas deshuesadas a hervir a fuego lento con el vino y el azúcar. Si queda demasiado espesa puedes añadir un poco de agua. Pasados unos 30 minutos estarán listas. Pásalas por la batidora y cuela. Sirve colocando unas patatas, sobre ellas una rodaja de solomillo y un generoso chorro de salsa.
Un delicioso y original toque en un plato muy sencillo.
Ingredientes:
Dora unos minutos los trozos de pollo en aceite bien caliente y escurre en papel absorbente. Mezcla, con tenedor, la salsa rosa con la mermelada y unta cada pieza de pollo con esta sorprendente salsa.
Coloca en una fuente de horno el pollo y tapa con papel de aluminio. Mantén la cocción a temperatura fuerte (220º) 20 minutos (dando la vuelta al pollo al menos una vez). A mitad de cocción, incorpora el caldo.
Cuando el pollo esté hecho, recoge de la bandeja la salsa que se haya formado y en un cazo, a fuego muy suave, ponla a calentar añadiendo las cerezas lavadas y sin rabito. Déjalas hervir unos minutos y vierte sobre el pollo en el momento de emplatar.
Aprovecha la temporada de cerezas para hacer una mermelada natural que podrás utilizar en numerosos postres (como relleno de galletas y tartas, sobre tostadas y crêpes, acompañando un apetecible helado, o sobre una generosa porción de requesón o queso fresco).
Ingredientes:
Lava y deshuesa las picotas y ponlas a hervir a fuego muy lento con el azúcar y el zumo de limón (si lo deseas también puedes añadir una cucharadita de canela molida). Mantenlas al menos 30 minutos. Pasa por el chino y cuela. Puedes conservar tu mermelada en botes de cristal previamente esterilizados.
Les encantará a los más pequeños y es una forma perfecta de que coman fruta.
Ingredientes:
Derrite el chocolate con el azúcar al baño maría. Lava las cerezas y envuélvelas en la deliciosa mezcla. Conserva en nevera para que se enfríen y se endurezca en chocolate (colócalas en una rejilla para que no se peguen al plato).
A las pocas horas tendrás unos riquísimos bombones naturales.
Con unas cerezas frescas lavadas y deshuesadas, leche y azúcar al gusto, obtendrás un delicioso y nutritivo batido ideal para los más pequeños de la casa. Si quieres cuidar tu figura, emplea leche desnatada o aún mejor, leche de soja y añade edulcorante o un poco de fructosa para endulzar. ¡Una delicia!
Cualquier pieza de carne asada encontrará en la salsa de cerezas, su acompañamiento ideal.
Aprovecha la temporada de cerezas para hacer una mermelada natural que podrás utilizar en numerosos postres (como relleno de galletas y tartas, acompañando un apetecible helado, o sobre una generosa porción de requesón o queso fresco).
Rápidos, fáciles y riquísimos. Los bombones de cerezas conquistarán a los más pequeños y es una forma perfecta de que coman fruta.