Recetas con fresas depurativas y bajas en calorías
Con la llegada de la primavera también llegan las deliciosas y saludables fresas. Plagadas de beneficios, son ideales para cuidar tu figura sin renunciar al sabor. Ficha las recetas depurativas que te proponemos con la fresa como protagonista y disfruta mientras te cuidas.
Las fresas son una de las frutas con menos calorías (unas 30-35 Kcal. por 100 gramos) y ellas solitas son en sí mismas un verdadero manjar. Ahora que empieza su temporada y están en su mejor momento, benefíciate de sus excelentes propiedades (poderoso antioxidante) y aprovecha para incorporarlas a otros alimentos saludables como el yogur o los cereales del desayuno. Además, puedes incluirlas en ricas y originales recetas y no solo reservarlas para los postres. Mira los platos tan sanos y apetecibles que te proponemos:
Ensalada de pasta con fresas
Refrescante, ligera y deliciosa.
Ingredientes:
80 gramos de pasta por persona (espaguetis, macarrones, pajaritas de colores...)
250 gramos de fresas
1 cebolleta
1 lata de maíz dulce
Aceite de oliva
Vinagre
Pimienta y sal
1. Hierve la pasta al dente y mientras se cuece, lava y corta las fresas en láminas y la cebolleta en cuadraditos pequeños.
2. Una vez fría, añade a la pasta las fresas, la cebolleta y el maíz.
3. Adereza con aceite de oliva, vinagre, sal y pimienta al gusto y ¡listo!
Alcachofas con fresas
Más depurativa, ¡imposible!
Ingredientes:
Alcachofas (2-3 por persona)
250 gramos de fresas
2-3 dientes de ajo
Zumo de 1 limón
1 cucharadita de azúcar (o edulcorante)
1 cucharada de vinagre de Módena
Aceite de oliva
Pimienta y sal
Gtres
1. Prepara las alcachofas cortando el tallo y eliminado las hojas externas (las más duras). Ponlas a hervir unos 20 minutos y, pasado este tiempo, reserva.
2. Mientras, haz el aliño en el que pondrás a macerar las alcachofas al menos 3 horas (mejor dejarlas la noche anterior). Machaca los ajos en el mortero y agrega el zumo de limón, una cucharada de aceite de oliva y un toque de sal y de pimienta.
3. Pasado un tiempo, en el que las hortalizas hayan cogido sabor, dales un nuevo hervor en un poco de agua y junto a su aliño.
4. Mientras se hacen, unos minutos (5-8), trocea las fresas en cuadrados.
5. Monta el plato situando en el mismo las alcachofas (con su jugo), y, sobre ellas, los dados de fresa. Espolvoréalas con un pellizco de azúcar y unas gotas de vinagre suave.
Tosta de bacalao con fresas
Sabor y salud en un bocado.
Ingredientes:
Pan de molde (mejor integral)
200 gramos de bacalao ahumado
¼ de repollo o lombarda
150 gramos de fresas
Aceite de oliva
Pimienta y sal
1. Tuesta el pan de molde o, si lo prefieres, haz tu tosta con biscotes. Úntalo con unas gotas de aceite de oliva y un pellizco de sal y pimienta.
2. Coloca sobre cada porción de pan una lámina de bacalao ahumado. Pon sobre ella las fresas laminadas y termina tu tosta colocando unas tiras muy finas de lombarda o repollo.
Pechugas de pollo (o pavo) con salsa de fresas
La pechuga de pollo dejará de ser aburrida.
Ingredientes:
1/2 kilo de pechugas de pollo o pavo
200 gramos de fresas
Vinagre balsámico
Aceite de oliva
1/2 vaso de vino tinto
1 cucharada de miel
Sal y pimienta al gusto
Gtres
1. Prepara las pechugas cortándolas en tacos y aderézalas con sal, pimienta y 2-3 cucharadas de vinagre balsámico. Deja reposar unos 15 minutos para que maceren ligeramente.
2. Mientras, lava y corta cada fresa en dos mitades. Seguidamente, coloca el pollo en una sartén, con un poco de aceite, y dora unos minutos.
3. A continuación, añade el vino tinto y la cucharada de miel. Deja que el vino se evapore y la salsa reduzca.
4. Apaga el fuego y, aún en caliente, incorpora las fresas. Remueve para que las fresas se unan al guiso y sirve inmediatamente.
Ensalada de queso y fresas
Sencilla, rápida y deliciosa.
Ingredientes:
300 gramos de berros y/o canónigos
150 gramos de queso fresco tipo burgos
200 gramos de fresas
Aceite de oliva, vinagre, sal y orégano
1. Trocea el queso en dados y las fresas en láminas.
2. Prepara tu ensalada mezclando los berros/canónigos con ambos ingredientes y aliña con una vinagreta suave en la que incorpores un toque de orégano para darle un aroma y sabor muy especial.