Analizamos el simbolismo del negro y repasamos sus hitos a lo largo de la historia. ¿Por qué nuestras abuelas se casaron de negro? ¿Cómo podemos incorporarlo a los vestidos de novia actuales?
La alfombra roja de los Globos de Oro 2018 se teñía de negro. Prácticamente la totalidad de asistentes a la gala denunciaron así los numerosos casos de acoso a las mujeres en Hollywood. Un escándalo que ha salpicado al mundo del espectáculo y que ha llegado hasta la 75ª edición de estos premios. Una imagen histórica que está dando la vuelta al mundo.
Y con motivo del gran protagonismo que tuvo el negro en una noche tan especial, con la ayuda de la modista Laura Escribano analizamos el papel del negro en la moda, su evolución histórica y las claves para incluirlo en los vestidos de novia actuales.
Del luto al LBD (Little Black Dress): El negro a través de la historia
El negro está repleto de fuerza y simbolismo. Tiene muchísimos significados y se le asocia con diferentes conceptos. Se trata del tono por excelencia en los ritos funerarios de la cultura occidental. Por ello, también está asociado a la tristeza, soledad, nostalgia, duelo, mala suerte, lágrimas, etc.
Hace un siglo el negro era sinónimo de luto y de duelo por la pérdida de un ser querido. Estaba relacionado con el fin de todo, de la vida, de ahí que estuviera ligado al fallecimiento. Sin embargo, el paso de los años y los cambios culturales han propiciado una evolución de su concepto. En la actualidad, entendemos el negro con nuevos significados y diferentes acepciones.
Coco Chanel, con su icónico Little Black Dress, fue la verdadera impulsora del negro en 1920. Ella hizo que las mujeres de la época lo lucieran como símbolo de elegancia y modernidad. Hasta nuestros días. En cuanto a iconos femeninos del negro encontramos a la eterna Audrey Hepburn en la famosa película "Desayuno con diamantes". Un personaje convertido en mito del cine que refleja a la perfección la elegancia del negro.
En la actualidad, el negro es sinónimo de glamour, estilo, elegancia atemporal, sensualidad y seducción.
¿Por qué nuestras abuelas se casaron de negro?
Cuando pensamos en una novia, automáticamente nos viene a la cabeza la típica imagen de un vestido blanco. Sin embargo, “la tendencia de los últimos años nos sugiere que las novias se atreven cada vez más con otro tipo de tonalidades e incluso por añadir color a sus vestidos. En el atelier trabajamos con tejidos antiguos muy especiales, apostamos por tonos no blancos que tiran al vainilla, beige o blanco roto”, explica la modista.
Seguro que si buscamos en los cajones de nuestra abuela encontraremos fotos de su boda con un vestido negro. Durante la recesión económica, tras la Guerra Civil, las telas escaseaban en España y solo las mujeres de clase alta podían permitirse el lujo de comprar tejidos blancos y bordados. Por eso, la mayoría de las novias se casaban de negro. De esta forma, reutilizaban el traje para ir a misa los domingos o para otras celebraciones. Combinaban su vestido, generalmente un traje de chaqueta, con un velo o mantilla, también en color negro, sujeto por una peineta o una corona de flores blancas de azahar.
¿Cómo incorporar el negro a los vestidos de novia?
El negro es el color infalible y no hay motivos para renunciar a él el día de tu boda. Existen muchas formas diferentes de lucir el negro en tu vestido de novia. Si quieres lucirlo de manera sutil, puedes hacerlo en pequeños detalles de tu vestido. Pero si te atreves, no lo dudes y elige un total look black o una mezcla de encajes antiguos en tonos crudos con negro para ligar la sutileza de los tonos terrosos con el más enigmático de todos los colores. De esta forma aportarás una imagen cargada de personalidad, muy definida, provocadora y elegante.
No olvides que el negro sigue siendo el color más poderoso. Apostar por él es todo un reto pero, sin duda, un gran acierto.