Dale un aire nuevo a tu dormitorio con soluciones prácticas, sencillas e imaginativas con las que podrás redecorar, renovar y ganar más espacio de almacenaje, ¿te animas?
Mariola Báez Verdú 4m 32s
Cada cierto tiempo es conveniente, y siempre agradable, repasar la decoración de esa habitación tan especial que es el dormitorio. No se trata de hacer complicadas y costosas obras, sino de modificar o incluir algunos detalles que pueden llegar a conseguir un notable cambio.
Una de las piezas claves de la decoración de tu cuarto es, sin duda, el cabecero de la cama. Sólo con sustituirlo, tu habitación parecerá otra. Tienes multitud de ideas para hacer desaparecer esa sólida pieza de madera de la que tal vez te hayas cansado por otras más ligeras que renueven el conjunto en su totalidad. Por ejemplo, un cabecero de forja dará un toque romántico a tu habitación y conseguirá visualmente una sensación de mayor espacio y ligereza. Si prefieres un acabado luminoso y natural, apuesta por un cabecero de mimbre, que quedará genial con unas paredes en tonos claros.
Para presupuestos ajustados, una buena idea es crear tu propio cabecero únicamente a base de cojines, una solución perfecta para conseguir un look primaveral en tu hogar. Prueba a combinarlos en diferentes tamaños y colores y verás que el resultado es excelente.
Si no te gusta ver la pared tan "desnuda", puedes recurrir a la decoración con vinilos. Tienes mil diseños (motivos vegetales, estrellas, soles, dibujos abstractos...) Se colocan de manera muy sencilla y son capaces de transformar y llenar de vida cualquier habitación (si sustituyes el típico cuadro que se encuentra sobre la cama por uno de estos vinilos ultramodernos, el cambio será espectacular). Otra posibilidad a tener en cuenta, especialmente si te gustan las manualidades, es confeccionar tu propio cabecero patchwork para darle a tu dormitorio un irresistible aire bohemio - chic. Con unas tablas de madera no muy pesadas, un poco de espuma y distintos trozos de tela puedes hacerlo forrando cada una de las maderas y colocándolas juntas en un único soporte del tamaño que prefieras (luego sólo tendrás que fijarlo a la pared y tendrás tu innovador cabecero).
1. Los textiles pueden ayudarte a conseguir tu objetivo. Si te aburre la decoración que te rodea, prueba a cambiar la ropa de cama y las cortinas. Si ya no le ves el encanto a la colcha de florecitas, sustitúyela por una de color liso y tono rompedor (malva, rosa, azulón) a juego con las cortinas. 2.Pon un espejo en la puerta de ese armario que ya no te gusta y lo habrás renovado totalmente al tiempo que ganas un mini vestidor.
3. Si el presupuesto no da para lámparas nuevas, prueba a cambiar únicamente las tulipas de cristal (¡ojo, comprueba que encajan!) o, en caso de ser de tela, forra las pantallas con un nuevo tejido. ¡Sencillo y efectivo!
4. Si no sabes dónde meter los zapatos y otros complementos, seguro que encuentras un rincón válido para un pequeño mueble zapatero. Si lo prefieres, una idea económica, original y de lo más práctica es colocar un par de baldas en la pared (próximas al suelo) y poner en ellas tu calzado favorito. Puedes completar el conjunto con un perchero de pared donde dejar pañuelos y foulares, sombreros, collares largos... Ganarás espacio y tu habitación tendrá un inconfundible toque personal.
5. Por último, recuerda que tienes muchos pequeños huecos que puedes aprovechar para guardar aquellas cosas que menos usas. Bajo la cama o en el espacio interior entre las patas de la mesilla siempre puedes colocar prácticas cajas o coquetas cestas, ideales para guardar la ropa de cama, o la ropa que te pones con menos frecuencia. Todo ordenado y tu habitación, perfecta.
FOTOS
Cambia la ropa de cama para darle un aire nuevo al dormitorio
Si te aburre la decoración que te rodea, prueba a cambiar la ropa de cama y las cortinas. Si ya no le ves el encanto a la colcha de florecitas, sustitúyela por una de color liso y tono rompedor (malva, rosa, azulón) a juego con las cortinas.
Cabeceros elaborados con cojines
Una buena idea es crear tu propio cabecero únicamente a base de cojines, una solución perfecta para conseguir un look primaveral en tu hogar. Prueba a combinarlos en diferentes tamaños y colores y verás que el resultado es excelente.
Un cabecero de forja para dar ligereza al dormitorio
Un cabecero de forja dará un toque romántico a tu habitación y conseguirá visualmente una sensación de mayor espacio y ligereza.
Los vinilos en la pared como cabecero
Si no te gusta ver la pared tan “desnuda”, puedes recurrir a la decoración con vinilos. Tienes mil diseños (motivos vegetales, estrellas, soles, dibujos abstractos...) Se colocan de manera muy sencilla y son capaces de transformar y llenar de vida cualquier habitación.
Baldas para ganar espacio en el dormitorio
Una idea económica, original y de lo más práctica es colocar un par de baldas en la pared (próximas al suelo) y poner en ellas tu calzado favorito. Puedes completar el conjunto con un perchero de pared donde dejar pañuelos y foulares, sombreros, collares largos... Ganarás espacio y tu habitación tendrá un inconfundible toque personal.