Tras los excesos veraniegos, llega el otoño, una época complicada, pues la monotonía se suma al estrés del día a día, atacando directamente a la piel que ya está más apagada, tirante y reseca debido a los rigores propios del estío. Además, la caída del cabello es otro de los problemas a los que nos enfrentamos en otoño, siendo causa de preocupación en muchas mujeres.
A fin de que superes la estación con nota y no cambie tu belleza, ficha los mejores consejos de la mano de Claudia di Paolo, referente en estética y cosmética capilar:
En otoño el cabello se cae más y es algo inevitable, pues forma parte del proceso natural del nacimiento y crecimiento del mismo. En realidad no se trata de una pérdida de cabello, sino de una renovación. Para favorecer el crecimiento e incrementar la fortaleza de los nuevos cabellos, las vitaminas B5 y H son esenciales. Asegúrate de consumir alimentos que contengan estas vitaminas como los cereales integrales y las legumbres verdes. Además, si quieres que el frío no pase factura al cabello, recurre a champús, acondicionadores y mascarillas que ayuden a nutrirlo y eviten que se reseque.
¿Quieres tener un pelo maravilloso? Si pruebas a humedecerte el cabello con agua tibia y luego aplicas un poco de aceite de coco acompañándolo de un breve masaje, tu pelo brillará con luz propia. Acuérdate de aclarar tu melena después de haberte aplicado el aceite.
Tras el verano es lógico que notes tu piel opaca, fruto del deterioro en las capas superficiales. La solución para volver a presumir de piel bonita es una exfoliación integral. Exfoliar la piel es beneficioso para alisar y dar brillo a la dermis. Además, mejora la circulación y combate la celulitis. Convierte el exfoliante en tu producto estrella. Te recomendamos que pruebes con un cepillo especial de fibras naturales que puedes encontrar en tu herbolario más cercano. Para el rostro utiliza un producto específico que contenga gránulos pequeños ya que la piel de la cara es más fina y delicada que la del resto del cuerpo. Prueba a exfoliar al menos una vez por semana.
También puedes apostar por los “peelings”, más profundos y eficaces para acelerar el proceso natural de regeneración de las células. Dependiendo del producto, podrás aplicarlo de 2 a 3 veces por semana. En solo un mes disfrutarás de una piel nueva, tersa, hidratada y lisa.
Asegúrate de mantener un nivel adecuado de humedad en casa, pues las calefacciones resecan la piel. Además, aunque te tiente, evita bañarte o ducharte con agua excesivamente caliente, se elimina la capa protectora defensiva de la piel. Sustituye el jabón que usas habitualmente por un gel muy suave rico en lípidos, con pH5.
Además, ¿sabías que el plátano maduro es estupendo para la piel? Tritúralo y aplica sobre el rostro, en diez minutos obtendrás una piel suave que lucirá espléndida.
En otoño tienes que hacer frente al frío, al viento y también al sol. Utiliza una crema hidratante y nutritiva que tenga factor de protección (al menos de 15) antes de salir de casa después de una limpieza profunda. Apúntate a las mascarillas si notas la piel muy seca. Además, para mantener tus labios hidratados, “abusa” del protector labial o vaselina, que resulta ideal aplicar también por las noches, antes de acostarte, para despertar con unos labios hidratados y perfectos.
En lo que respecta a las manos, evita que se resequen y agrieten utilizando una loción específica a base de glicerina. Si no es suficiente, apuesta por las mascarillas caseras, ideales para rescatar tus manos y lucirlas tersas, suaves y jóvenes. En el resto del cuerpo aplica crema hidratante haciendo especial hincapié en los talones, las rodillas y el cuello. Aprovecha para elegir una loción que además de hidratar y nutrir en profundidad, contenga activos reafirmantes y drenantes.
El selenio y las vitaminas A y C ayudarán a que tu piel se mantenga elástica y joven. La vitamina A es un excelente antioxidante que encontrarás en la espinaca, brócoli y en diferentes frutas y vegetales de color naranja como las zanahorias y las naranjas. El té, el cacao y la soja son antioxidantes mientras que la coliflor, el perejil, el pimiento crudo, los kiwis y frutas cítricas son excelentes fuentes de vitamina C. Por su parte, el selenio está presente en carnes y mariscos.
Además, come huevos, pescado, guisantes y judías verdes, pues aportan azufre a tu organismo. Puedes además incluir un complemento de levadura de cerveza, el secreto natural para un cabello sano y fuerte.
Por otro lado, el silicio resulta fundamental para la biosíntesis del colágeno y su carencia provoca estrías, pérdida de elasticidad y arrugas. Para evitarlo toma semillas y frutos secos. También, bebe zumos e infusiones de aloe vera, pues ayudan a regenerar los tejidos, y no olvides los 8 vasos de agua como mínimo que debes beber al día, esencial para mantener la piel hidratada.
No es necesario que vayas diariamente al gimnasio, pero si puedes hacerlo al menos 3 veces por semana notarás más elasticidad en tu cuerpo y en tu piel. Si los espacios cerrados te agobian, plantéate ir a correr al aire libre, lo importante es moverte y alejarte del sedentarismo. Y si eres fan del Yoga o Pilates, no lo dudes, son perfectos para trabajar y equilibrar cuerpo y mente.
Sin duda, el mejor cosmético es la felicidad. Aprovecha cualquier momento libre o fin de semana para darte un capricho o disfrutar de una escapada, ideal para desconectar y combatir el estrés. Aprende a relajarte y a tomarte las cosas con humor, tu piel te lo agradecerá.
Además, en el caso de que ya notes un decaimiento general, recuerda que los excesos son perjudiciales: no abuses del alcohol, el mayor agente para la retención de líquidos, ni del tabaco, que favorece los radicales libres. Además, evita aquellos alimentos que deprimen y aumentan la ansiedad.
Los olores frescos del verano dejan paso a fragancias más intensas y amaderadas. Los matices orientales y las esencias exóticas y dulces acompañan mejor a los días de otoño. ¡Hazle un regalo a tu belleza renovando perfume!