La cecina, también conocida como “jamón de vaca”, es una carne deshidratada o curada que suele proceder del ganado vacuno. Se elabora a partir del despiece de los cuartos traseros de la vaca (tapa, babilla, contra y cadera).
Debido al auge de las dietas proteicas, este embutido se ha puesto de moda. Descubrimos todos los beneficios y propiedades de la cecina:
Baja en grasa. El aporte graso de la cecina no es elevado, teniendo en cuenta que la mayor parte se ve y se puede eliminar. Además, gran cantidad de su grasa es “saludable”, compuesta por ácidos grasos monoinsaturados. Es una buena opción como aperitivo entre las diferentes comidas. Descubre aquí los datos nutricionales de la cecina.
Rica en proteínas. La cecina es preparada a base de perder agua, siendo el resultado final una altísima concentración de proteínas, en torno a 40 gramos en 100 gramos de producto. Por eso, la cecina es un buen aliado en el proceso de recuperación muscular de deportistas y en sus dietas.
Sin carbohidratos. Para todos aquellos que sigan una dieta baja en carbohidratos como las dietas de definición que siguen los deportistas por temporadas, la cecina es un producto perfecto que aporta proteínas, grasas saludables y nada de hidratos.
Vitaminas y minerales. La cecina tiene un alto contenido en hierro, calcio, fósforo y vitaminas del grupo B, indispensables para el buen funcionamiento del organismo, evitar el cansancio, ayudar a prevenir el envejecimiento, fortalecer los huesos, mantener sanos los glóbulos sanguíneos…
Fuente de zinc. El alto contenido en zinc de la cecina facilita la asimilación y almacenamiento de la insulina, por ello se recomienda a personas que sufren enfermedades como la anemia o la diabetes.
Versatilidad en la cocina y un gran sabor. La cecina es un producto cárnico tremendamente versátil, ya que se puede consumir tanto por separado como integrada en multitud de platos, ya sean ensaladas, verduras, sopas, en canapés, empanadas, sándwiches… Su sabor es único e inconfundible, producto de su particular proceso de curación y al ahumado logrado con madera de encima y roble. En definitiva, un producto que te cuida de la forma más sabrosa.
¡Truco! Evitarás que los embutidos se pongan rancios una vez empezados si untas el extremo cortado con unas gotas de aceite de oliva.
