Poner las judías a remojo el dia anterior, ponerlas a hervir en una olla con una pizca de sal y cuando estén blandas escurrirlas, ponerlas en un bol separar tres cucharas enteras y chafar el resto con un tenedor, añadiéndole poco a poco agua templada, aceite, sal, un poco de vinagre al gusto, las cebollas troceadas muy pequeñitas y las 3 cucharadas de judias.
Llevar a la nevera.
Observaciones
Un plato que se sirve frío. La cebolla al gusto, se puede añadir más. Se come mojando sopas de pan.