
Llega el invierno y con él el frío, la lluvia y las primeras nieves que pueden poner en riesgo tu salud. Los cambios de temperatura propios de esta época del año, hacen que el gasto de energía sea mayor y por tanto el sistema inmunológico se vea afectado, siendo un blanco fácil para todo tipo de infecciones. ¿Cómo hacer frente al invierno?
Somos lo que comemos y es por ello que la primera medida para fortalecer nuestro organismo pasa por seguir una dieta equilibrada rica en alimentos antioxidantes y llenos de vitaminas. "El consumo de alimentos ricos en antioxidantes (frutas y verduras), prebióticos (ajo, cebolla, alcachofa) y probióticos (yogures y otros alimentos fermentados) pueden servir de ayuda para que nuestro sistema inmune trabaje de forma adecuada y nos proteja, en este caso, de infecciones de las vías respiratorias", nos explica Álex Pérez, nutricionista de GO fit.
Los cítricos son uno de los principales protagonistas de la temporada. Naranjas, mandarinas y pomelos, por su riqueza en vitamina C, son frutas especialmente indicadas en el otoño-invierno y están en su mejor momento.
Debemos fijarnos en el color de los alimentos para detectar en qué nutrientes son ricos. En otoño, los tonos cálidos como naranjas, rojizos y amarillos indican abundancia de carotenoides, que serán transformados en vitamina A en el organismo. Ésta tiene, entre otras funciones, un marcado poder antioxidante.
Teniendo como base los anteriores alimentos se pueden crear menús equilibrados y saludables que aportarán una buena dosis de vitaminas y antioxidantes, cubriendo las necesidades nutricionales que demanda el invierno de forma adecuada:
Además, no olvides consumir 2 frutas al día y un zumo de naranja, te asegurarás un abundante aporte de vitaminas, indispensables para disfrutar del invierno sin preocuparte por nada más.