La dieta antiinflamatoria ¡consigue mejorar la piel en siete días y retrasar el envejecimiento!
Una dieta antiinflamatoria rica en pescado y verduras sin almidón, no solo hará que pierdas peso, tiene el poder de prevenir el envejecimiento de la piel y revertir los daños ya visibles. ¡Descubre cómo!
La principal causa del envejecimiento de la piel es la inflamación, una reacción que se produce por tres razones: la carga genética, la radiación UV y las dietas pro-inflamatorias, con ácidos grasos omega 6 -presentes en aceites de soja, maíz o girasol- y alto contenido glucémico -como el pan, la pasta, el arroz o las patatas-. Estos alimentos aumentan la secreción de insulina generando la inflamación del sistema inmunológico y provocando la degradación del colágeno y la elastina.
Así lo explica el doctor Barry Sears, creador de la Dieta de la Zona: "La pérdida de grasa cutánea y la descomposición de la matriz de colágeno y elastina de la piel es la causa molecular de las arrugas".
Además, el doctor Barry Sears señala que "para eliminar los signos de la edad en la piel hay que combinar una dieta antiinflamatoria -alimentos con niveles limitados de ácidos grasos omega 6 y poca carga glucémica- y el uso de suplementos antiinflamatorios, que pueden disminuir la inflamación en el cuerpo y la piel, al incluir altas dosis de ácidos grasos omega 3 y polifenoles purificados".
Para mejorar la apariencia de la piel, el doctor Barry Sears recomienda comer verduras sin almidón y pescado, bases también muy asentadas en la dieta vikinga o dieta nórdica, que ensalza el consumo de verduras, frutas, pescados y alimentos integrales. "Las verduras sin almidón tienen una carga glucémica muy baja y contienen polifenoles y el pescado contiene ácidos grasos omega 3". Estos interactúan para retardar el envejecimiento de nuestra piel", explica el doctor.
Lo más interesante es que una dieta antiinflamatoria tiene el poder no solo de prevenir el envejecimiento de la piel, sino de eliminar el daño que ya existe. Según el Dr. Sears, "los beneficios antiinflamatorios de este tipo de alimentación son evidentes en pocos días". En los primeros dos días se reduce significativamente la sensación de hambre, a partir del tercer día se observa un aumento en el rendimiento físico, ya que hay más capacidad para convertir la grasa dietética almacenada en energía química. Dentro de los primeros siete días, la ropa sienta mejor, a pesar de que no se pierde mucho peso, porque lo que se está eliminando proviene de la grasa abdominal. La piel tiene un aspecto claramente más joven porque aumenta el flujo sanguíneo y se reduce la inflamación.
Además, Sears asevera que esta forma de alimentación sería ideal para prevenir el envejecimiento y reducir la inflamación en cada célula del cuerpo. "Así se vive más y mejor. La mejora de la piel es el indicador visual de que los beneficios de esta dieta están teniendo efectos positivos en el interior del cuerpo", concluye el Dr. Sears.