¿Cómo aprovechar el pan duro? ¡Las ideas y recetas más fáciles y prácticas!
No vuelvas a tirar el pan del día anterior. Ficha las ideas más rápidas, fáciles y prácticas para aprovechar el pan duro. También te damos 3 recetas sencillas y riquísimas con las que podrás aprovechar el pan sobrante: sopa de ajo, migas y pudin de chocolate.
En la mayoría de ocasiones, el pan del día anterior acaba en la basura. Sin embargo, es un alimento muy aprovechable cuando deja de estar fresco y con numerosos usos en cocina. Ficha las ideas más fáciles y prácticas para aprovechar el pan duro:
Pan rallado
Es una de las ideas más socorridas para aprovechar el pan del día anterior. Córtalo en pequeños trozos, introduce en un robot de cocina y tritura hasta que se forme una fina cantidad de pan rallado. También sirve un rallador manual, aunque el pan no queda tan fino.
Tostadas
Otra deliciosa manera de aprovechar el pan duro. Para hacer las tostadas, bastará pasar una finas rodajas "vuelta y vuelta" en una sartén antiadherente, sin nada de grasa, o colocarlas en una tostadora.
Picatostes
También se puede aprovechar el pan como guarnición de purés y cremas. Se corta en rodajas gruesas y después en cuadraditos. Estos se fríen en abundante aceite y, justo cuando se doran, se sacan de la sartén.
Canapés y entremeses
Otra forma que te proponemos para aprovechar el pan duro es cortar el pan en rodajas fijas y tostarlo en el horno o la sartén. Luego se aliña con un hilo de aceite de oliva virgen extra y se agregan los demás ingredientes: unos trocitos de jamón y pimiento verde, una ensaladilla de palitos de cangrejo, una base de tortilla con setas…
Sopas de leche
Una solución de lo más tradicional es preparar unas sopas de leche. Se pondrá un cazo al fuego con las rebanadas de pan duro y leche. Cuando comience a hervir se remueve con una cuchara de madera para que el pan se integre. Se añade azúcar y un poco de cáscara de limón, dejando cocer unos minutos. Se aparta del fuego, se reparte en cuencos y se espolvorea con canela molida. A la nevera hasta el momento de servir.
3 riquísimas y sencillas recetas para aprovechar el pan del día anterior
La cocina de aprovechamiento está de moda y no es para menos, porque se consiguen platos para chuparse los dedos. Con ayuda del panadero artesano Moncho López, te damos el paso a paso de estas deliciosas recetas que podrás preparar con el pan sobrante:
Sopa de ajo
Para prepararla, debemos hacernos con unas rebanadas de pan sentado preferiblemente candeal: “porque tiene una miga bastante prieta que es además bastante suave y absorbe muy bien los sabores de los caldos”, nos comenta Moncho.
Ingredientes:
8 dientes de ajo
100 gramos de pan sentado
Unas rodajas de chorizo o unos tacos de jamón serrano
3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
4 huevos
¾ de litro de agua o caldo de cocido
Pimentón dulce
Sal
Elaboración:
Cortamos el pan en rebanadas finitas, así como los ajos.
Ponemos a sofreír los ajos en el aceite caliente hasta que empiecen a dorarse y añadimos el embutido hasta que coja color.
Agregamos el pimentón y sofreímos un minuto, removiendo con cuchara de palo con cuidado de que no se queme.
Añadimos el pan, le damos unas vueltas y vertemos el agua y la sal o el caldo y dejamos cociendo hasta que el pan se esponje y la sopa espese.
Para servir cascamos un huevo en cada cuenco, servimos la sopa por encima y dejamos reposar un par de minutos para que los huevos se cuajen ligeramente.
Migas
“El mejor pan para hacer migas es el de hogaza porque tiene mucha miga. Una hogaza de trigo tradicional que esté bien asentada y pueda desmenuzarse con la mano, es perfecta para esta receta”, nos explica Moncho.
Ingredientes:
250 gramos de pan duro cortado en taquitos
125 ml de agua con sal
100 ml de aceite de oliva virgen extra
2 chorizos frescos
2 tiras de panceta gruesas troceadas
3 dientes de ajo
1 pimiento choricero
Elaboración:
Remojamos uniformemente los trozos de pan con el agua salada y los envolvemos en un paño durante dos horas, dándoles la vuelta de vez en cuando para que se reparta la humedad.
En una sartén se fríe el pimiento seco, la panceta y el chorizo, procurando que queden tostaditos. Una vez hechos se dejan escurrir sobre papel de cocina absorbente.
Reservamos un par de cucharaditas del aceite de la fritura.
Machacamos el pimiento hasta que quede como polvo, lo añadimos a la panceta y el chorizo y reservamos.
Ponemos una sartén grande al fuego y añadimos un poco del aceite nuevo más los 15 mililitros reservados y freímos los ajos. Añadimos las migas humedecidas y movemos constantemente hasta que queden sueltas y doraditas.
Cuando ya casi esté listo añadimos la mezcla del pimiento y los embutidos y dejamos reposar dos horas.
Pueden servirse las migas acompañadas de huevos fritos, boquerones rebozados o incluso uvas, que ahora mismo están de temporada.
Pudin de chocolate
“En este caso, es imprescindible usar un pan muy, muy blandito. El de molde sería ideal o incluso un pan de maíz 100%, porque además le aporta dulzor”, nos dice Moncho.
Ingredientes:
500 gramos de nata líquida
4 huevos
150 gramos de azúcar
300 gramos de pan
1 tableta de chocolate
Caramelo líquido
Esencia de vainilla
Elaboración:
Calentamos la nata en un cazo junto con el azúcar y la vainilla, removiendo hasta que se disuelva el azúcar pero sin que llegue a hervir.
Remojamos el pan cortado en trocitos con la nata tibia y cuando estén bien mojados añadimos los huevos ya batidos y el chocolate en trocitos.
En un molde, vertemos el caramelo líquido y añadimos la mezcla del pudin, tapamos bien con papel de aluminio y ponemos unos 40-50 minutos al horno al baño maría a 180°.
Podemos servirlo con un poco de nata montada o helado de vainilla.
¿Quién dijo que cocinar con sobras era solo una costumbre de nuestras abuelas?
