¿Tienes a veces unas ganas tremendas de comer chocolate? Cuando sucede, un deseo casi irrefrenable te lleva a buscar con avidez el sitio donde lo guardas para calmar el antojo. Sin embargo, tu cuerpo te está pidiendo una cosa completamente diferente.
La clave radica en entender el mensaje que te está enviando tu cuerpo y aportarle los nutrientes que necesita realmente. La próxima vez que te posea el deseo de tomar algo especial entre horas, antes de comerlo párate un segundo y piensa antes de llevártelo a la boca, pues podrás descubrir el origen de tus ansias por ciertos alimentos.
Descubre con esta práctica guía algunos de los antojos de comida más frecuentes y cómo combatirlos para cuidar tu dieta:
¿Estás planeando cocinar pasta para cenar esta noche? Pues el cuerpo quiere algo diferente. Cuando quieres comer hidratos de carbono, tal vez tu cuerpo eche en falta aminoácidos. Intenta comer salmón, nueces o legumbres en lugar de pasta o añádelos a la pasta para comer menos cantidad.
Si lo que te apetece comer es algo dulce, puede que estés haciendo pocas comidas al día y además tu dieta sea demasiado baja en calorías, razones suficientes para sufrir bajadas de azúcar en sangre, lo que se denomina "hipoglucemia".
Soluciónalo haciendo 5 comidas ligeras al día para mantener los niveles de glucosa estables. Además, evita las harinas refinadas, y en general, los hidratos de carbono de elevado índice glucémico.
Muchas personas toman café de manera rutinaria y mecánica, a diario, cuando tienen sueño. Pero si de repente quieres tomar cafeína (incluso una bebida de cola), es una prueba de que tu cuerpo necesita hierro o azufre. Come pimientos rojos, huevos, ajo, cebollas, etc. Son alimentos muy sanos que te ayudarán a controlar el consumo de cafeína.
Cuando tienes ganas de comer frituras, tu cuerpo en realidad te está pidiendo un aceite saludable. No podemos olvidar que los lípidos son uno de los tres principales grupos de nutrientes. Come queso, yogur, gambas, pescado y, por supuesto, aceite de oliva.
Acabas de terminar de trabajar y tomar una copa de vino o una cerveza te relaja, así que cedes al antojo, pero lo que probablemente no sepas es que tu cuerpo puede estar igual de feliz y relajado si le aportas potasio o calcio. ¡Come carne roja, aceitunas o plátanos antes de embriagarte!
¿No puedes pasar sin tomar bebidas con gas durante las comidas? Puede ser falta de calcio en el cuerpo. ¿Qué tal tomar un batido de espinacas, nabo, apio y almendras para desayunar? Tendrás suficiente calcio y la energía necesaria hasta la hora de comer.
Cuando empiezas a comer galletitas saladas o patatas fritas es difícil parar hasta que la bolsa está vacía. Es evidente que este exceso no es nada recomendable. Elige un método para tomar el sodio que necesitas de manera más saludable: ¿qué tal unos anacardos, unos pistachos o unas almendras? Son muy ricos en minerales y grasas sanas.
Cuando te apetece comer alimentos salados, posiblemente tu cuerpo acusa cierto grado de deshidratación y está necesitando un mayor aporte de líquidos. Soluciónalo bebiendo más agua, infusiones, caldos y zumos naturales.
Es difícil no caer en la tentación de comer chocolate. Pero ese deseo evidencia una carencia de vitamina B, magnesio y ácidos grasos, así que en su lugar puedes tomar uvas, repollo, carne y nueces.