
Tras épocas de excesos, es más que probable que te sientas hinchada y la báscula te haya regalado algún que otro kilo de más. Para recuperar tu peso ideal y volver a sentirte bien, los médicos expertos de Adelgar recomiendan llevar a cabo una dieta depurativa para desintoxicar el cuerpo y eliminar los líquidos sobrantes.
Durante estos días, los cuales puedes haber llevado una alimentación desordenada en cuanto a horarios y alimentos, el organismo se ha sobrecargado de sustancias tóxicas que es mejor eliminar antes de que te tomen demasiado cariño. Y es que, no conviene dejar que pasen largos periodos de tiempo sin poner remedio ya que el organismo cuenta con unos genes ahorradores de energía que en el caso de sobreabundancia provocarán que el cuerpo tienda a mantener las reservas adquiridas si esta situación se mantiene en el tiempo.
Como primera medida debes aumentar la cantidad de agua ingerida para favorecer la expulsión de toxinas por los riñones, y como segunda medida tendrás que eliminar de la dieta: cafeína, alcohol, grasas animales, proteínas animales, azúcares, harinas refinadas, alimentos procesados y lácteos.
Es muy importante que durante esta "cura" se limite el consumo de sal, ya que de lo contrario los riñones tendrán que trabajar más. Así, debes eliminar alimentos como los embutidos, conservas, ahumados, sopas preparadas…, dado su elevado contenido en sal.
Como fuentes de proteínas, indispensables para completar la dieta y evitar carencias nutricionales, se incluirán aquellas de origen vegetal como la soja, el tofu y las legumbres.
Para sacar el máximo partido a las frutas y verduras, predominantes en estos días de dieta depurativa, conviene seleccionar las de temporada, tales como tomates, calabacines, pimientos, lechugas, sandía, melón y cerezas. Por sus propiedades diuréticas elegiremos fresas, pepino, melón, alcachofas, espárragos y piña, con esta última puedes elaborar deliciosas recetas depurativas. La lechuga también es un vegetal muy diurético, pero deberás tener cuidado con su consumo en el caso de que te produzca gases o hinchazón abdominal.
El apio también es un alimento excelente. Dadas sus propiedades antiinflamatorias, depurativas y desintoxicantes, se recomienda en dietas de control de peso. Su riqueza en fibra soluble y su insignificante valor calórico produce un gasto energético mayor en su digestión al que aporta. Además, actúa como un diurético natural debido a su elevado contenido en potasio y aceites esenciales. Por si fuera poco, el apio contiene derivados hormonales que ayudan a aliviar el síndrome premenstrual y los dolores asociados a la menstruación.
Así, las bases de la dieta depurativa que te proponemos para 1 semana son:
Como refuerzo te recomendamos incluir infusiones diuréticas como el té verde y la cola de caballo, así como el cardo mariano o el boldo, que además de favorecer la función del hígado y la vesícula biliar -los órganos ha depurar- participan también en la eliminación de toxinas. Es ideal tomar una taza de infusión hepático-biliar tras la comida y una segunda tras la cena, la encontrarás preparada en herbolarios, aunque puedes hacerla tú misma comprando los ingredientes: boldo, cardo mariano, alcachofa, desmodium y rábano negro.
Como primeros platos: alimentos ricos en fibra y con un contenido bajo de glúcidos: verduras (enteras o en purés), ensaladas, sopas, caldos vegetales, de pescado, etc. Además, se consumirá arroz blanco y legumbres con verduras 2 veces por semana siempre en la comida.
Como segundos platos: pescado blanco en mayor proporción que el pescado azul, carnes blancas como el pollo o el pavo con mayor frecuencia que las carnes rojas que se aportarán en menor cantidad (1 vez por semana) y huevos en tortilla, revueltos, cocidos o escalfados. Se evitarán las frituras y alimentos rebozados.
La bebida de acompañamiento debe ser agua. Es necesario beber al menos dos litros al día (corresponden a 8 vasos de agua), de esta manera se mantiene al organismo adecuadamente hidratado, además de ayudar a eliminar las toxinas acumuladas por el aporte excesivo de dulces y grasas.
El postre se sustituye por infusiones que facilitan la digestión, haciéndola menos pesada. El té verde, té rojo y menta poleo tienen función antioxidante y ayudan a reducir los niveles de colesterol LDL en sangre.
La merienda, al igual que la media mañana, conseguirá regular tu apetito de cara a la cena. Se tomará una infusión y una pieza de fruta.
En la cena es conveniente evitar la consentida fruta y lácteos, ya que aportan azúcares de absorción rápida y son transformados fácilmente en grasa. Se deben tomar hidratos de carbono de absorción lenta como las verduras y proteínas (huevos, carnes y pescados).
Todas estas recomendaciones deben ir acompañadas de un ejercicio físico diario moderado como caminar 30-45 minutos cada día, esto creará un efecto sinérgico con la dieta favoreciendo la pérdida de grasa y en consecuencia, del peso.