Se pasa el atún por la picadora y que quede bien picado. Se le añaden dos o tres sardinas. Depende de cada uno porque tienen un sabor muy fuerte. Batir hasta que quede una pasta.
Se le añaden un par de cucharadas de queso de tarrina, también depende del gusto de cada uno si se quiere más suave o menos.
Se le añade un poquito de limón y pimienta. Sal no, porque las sardinas ya llevan mucha sal. Si se quiere, añadir un poco de aceite de oliva o de las latas de atún o sardinas.
Está mejor si se come un par de horas después de que esté hecho.
Ideal para comer con todo, incluso bastoncillos de pan integral. O también con palos de verduras: zanahorias, apio...