¿Has soñado alguna vez con recibir, de vez en cuando, un masaje relajante sin salir de casa y sin gastarte un duro? ¿sabes cómo convencer a alguien de que aprenda a darte un masaje?
Sin duda, la mejor solución es, como suele decirse coloquialmente, "practicar con el ejemplo". El masaje es, la mitad arte y la mitad ciencia pero, sobre todo, es ganas. Ganas de producir un bienestar general en la otra persona y conseguir el efecto deseado.
En la espalda se encuentran un gran número de terminaciones nerviosas. Además, es una zona del cuerpo que desarrolla un gran esfuerzo físico de mantener la postura propia del ser humano para caminar erguido. Por ello, suele ser un buen punto de partida para comenzar a iniciarte en la técnica de los masajes.
Relaja tu cuello en casa con los mejores ejercicios y automasaje
Antes de nada, es fundamental que coloques al destinatario de tu masaje boca abajo, sin ropa y totalmente estirado. Un poco de música ambiente, una luz tenue y una temperatura agradable serán fundamentales para que pueda relajarse y disfrute y aproveche al máximo todos los beneficios de esta práctica. Ten en cuenta que debes tener las manos limpias y aplicar algún aceite o crema hidratante para que el contacto cutáneo sea el adecuado.
A continuación, te detallamos, paso a paso, cómo debes utilizar tus manos para lograr realizar un masaje completo, sencillo y muy beneficioso. ¡Toma nota!
Las repeticiones de estos pasos ya dependen de ti y del bienestar de tu receptor. Ten siempre presente que no debes realizar estas prácticas con prisa, bajo presión o si no es posible crear una atmósfera de calma y relax ya que el principio básico del masaje es... ¡relajarse y disfrutar!
Los beneficios de los masajes han evolucionado desde tiempos remotos hasta nuestros días a través de técnicas muy sencillas para proporcionar relajación y favorecer el sueño, hasta el desarrollo específico de algunas más complejas y dirigidas a aliviar o eliminar dolencias concretas.
Entre los principales efectos que se consiguen a través de los masajes "caseros", al margen de los estrictamente profesionales, caben destacar los siguientes efectos:
Además, según un estudio publicado en el Journal of Alternative and Complementary Medicine, los masajes puede alargar la vida debido a que al recibir un único masaje en profundidad descienden en un 7% la presión arterial y en 11 pulsaciones por minuto la velocidad del corazón.
El Dr. Alan Kaye, autor del estudio asegura que "con el tiempo, estas pequeñas mejoras pueden sumar hasta seis años la esperanza de vida de una persona".
Lo mejor es que los efectos beneficiosos de un masaje pueden durar varios días y que cuantos más se reciben más sencillo resultará que el cuerpo se reajuste por sí solo de un modo permanente.