Una de las formas más efectivas para disminuir la hinchazón de los pies, el cansancio, aliviar dolores, además de suavizar la piel, estimular la relajación y el bienestar general, es un esmerado masaje. Mima tus pies todo el año y siente la diferencia. No hace falta ser un experto ni disponer de mucho tiempo o grandes preparativos para disfrutar de un masaje de pies que conseguirá revitalizarlos y dejarlos como nuevos en apenas 10 minutos.
Nada produce una sensación de mayor agotamiento que tener los pies cansados tras una dura jornada. Y es que, los pies son una parte muy receptiva del organismo y está expuesta a sufrir problemas de sequedad, hinchazón y otras molestias. Si nuestros pies están cansados, hinchados y/o adoloridos, provoca una sensación generalizada de debilidad y agotamiento, pero con un buen masaje de pies se relaja cuerpo y mente liberando toda la tensión acumulada.
No es necesario ser un experto masajista, pues con unas sencillas normas básicas, tu pareja o cualquier otro miembro de la familia podrá practicar un masaje revitalizante en los pies que los dejará como nuevos en apenas 10 minutos. Devolverá el equilibrio psicofísico, estimulando el bienestar y relajación general, recuperando a su vez la tersura y suavidad natural de la piel.
Previo al masaje
Busca una posición cómoda en el mejor ambiente posible, con música suave o luz tenue es perfecto para contribuir a la relajación y potenciar los efectos del masaje.
Es preferible no masajear la piel en seco, lo ideal es dejar unas gotas de esencia de aceite de lavanda en un frasco con aceite de almendras dulces y usar esta mezcla para el masaje. Es importante frotar el aceite en las manos para calentarlo antes de aplicarlo sobre la piel. Como alternativa a los aceites se puede utilizar crema hidratante.
El masaje debe ser firme pero no doloroso, de modo que si se notan molestias en una zona no se debe insistir.
Masaje de pies, paso a paso
Recuéstate de manera confortable apoyando los pies en el regazo de la persona que los masajeará siguiendo estas sencillas directrices:
Tomar el pie con los pulgares encima y los otros dedos debajo. Manteniéndolos firmes se alisa el empeine con los pulgares, alejándolos uno para cada lado.
Tomar la punta del pie con una mano y colocar la otra mano sobre el talón como apoyo. Doblar el pie para arriba ejerciendo un poco de fuerza. Después se estira hacia abajo haciendo fuerza en el centro del pie.
Torcer el pie hacia un lado y otro como si se estuviera escurriendo ropa mojada.
Agarrar, apretar y estirar cada dedo uno a uno con firmeza, pero sin ejercer demasiada fuerza para evitar lesiones.
Masajear la planta del pie haciendo círculos firmes con los pulgares. Es importante presionar con firmeza para no hacer cosquillas.
Apoyar el pie en una mano y aplicar el masaje subiendo con presión firme desde los dedos hasta el tobillo.
Automasaje para un alivio rápido del dolor de pies
Para esos días agotadores en los que llegas a casa con los pies adoloridos y cansados, prueba con un sencillo automasaje. Solo necesitarás una bola de golf o una pelota de tenis para sentir alivio rápidamente. Toma nota:
Siéntate en una silla con ambos pies sobre el suelo.
Coloca bajo la planta del pie una bola de golf o en su defecto una pelota de tenis. Muévela de atrás hacia delante durante 20-30 segundos y después haz círculos durante 20-30 segundos más.
Presiona la pelota contra el suelo con más fuerza cuando notes alguna zona dolorida.
Aceites para el masaje, cómo elegirlos y cómo aplicarlos en los pies
Aunque sería posible masajear los pies en seco, se obtendrán mayores beneficios empleando aceites naturales, eligiendo el que más se aproxima a nuestras necesidades. Con el uso de aceites, se facilita el deslizamiento de las manos para un masaje más agradable, además, al penetrar profundamente en la piel, la suavizan y enriquecen con los activos que contienen. Te recomendamos algunos de los más empleados según la necesidad y las mejores formas de aplicarlos en el masaje de pies:
Aceite de avellana
Dadas sus propiedades astringentes, emolientes y tonificantes, es un aceite especialmente adecuado para el masaje de pies.
Muy indicado para quienes desean eliminan el cansancio en los pies y recuperar toda la energía.
Se absorbe fácilmente y permite utilizar una mayor cantidad.
Aplícalo de forma generalizada en todo el pie con un masaje de amasamiento insistiendo en talones y dedos.
Aceite de pistacho
Debido a su elevado contenido en ácidos grasos poliinsaturados, deja una suavidad inigualable en los pies y se absorbe fácilmente.
Además, en cosmética se utiliza para acelerar la regeneración de los tejidos, siendo un aceite muy indicado para pies resecos.
Aplícalo en pequeñas cantidades mediante un ligero masaje con movimientos circulares, desde el centro de la planta del pie hacia fuera.
Aceite de comino negro
Su acción estimulante, regenerante y tonificante, estimula la circulación.
Indicado para quienes sufren de hinchazón en los pies, ya que por su acción tonificante los deshincha y relaja rápidamente.
Aplícalo masajeando primero las zonas externas del pie hasta llegar al centro de la planta. No olvides terminar con un masaje en los dedos de abajo hacia arriba.
Aceite de cáñamo
Dada su riqueza en vitamina E, ácidos grasos insaturados y otros activos, resulta eficaz contra los hongos, infecciones e inflamaciones.
Aplícalo en pequeñas cantidades sobre la zona a tratar y efectuando un suave masaje de amasamiento hasta su completa absorción.