Llega el gran día, el día de tu boda y quieres lucir radiante. Para lograrlo y dejar sin palabras a los invitados, te contamos las cosas que “no” debes hacer antes de tu enlace.
La boda es uno de los momentos más especiales e importantes en la vida de cualquier pareja, ya que ese gran día todas las miradas se centran en la novia y el novio, los grandes protagonistas. Este hecho hace que queramos lucir radiantes y absolutamente espectaculares, dejando sin palabras a los invitados.
Para deslumbrar el día de la boda, los cuidados previos para la novia deben comenzar seis meses antes de la fecha elegida, ya que el proceso es largo. No obstante, dos semanas antes se recomienda incidir en obtener una buena higiene facial y realzar la mirada con un rizado y tinte de pestañas. Además, este ritual de belleza para novias debe acompañarse con un tratamiento flash de belleza facial y corporal.
Ser fiel a tu personalidad, apostar por la naturalidad y vestirte de novia, que es muy distinto a “disfrazarte”, son algunos consejos fundamentales, pero además, la gran estrella del día, la novia, debe evitar ciertas pautas antes de la boda, tal y como nos aconseja la experta en belleza Myriam Yébenes:
1.No se deben cambiar los productos cosméticos antes de la boda, pueden producir alergias inesperadas y del todo inoportunas.
2. No hay que intentar cambiar el diseño de las cejas, puede que la nueva forma quede demasiado “rara” y no convenza el resultado.
3. No debemos optar por un corte de pelo radical ni cambiar el color.
4.Evitar el bronceado de caña de azúcar para estar morena el día de la boda. En muchas ocasiones puede impregnarse el color en el vestido de la novia.
5.No se debe abusar de los rayos UVA ni tampoco hay que exponerse mucho al sol: el bronceado no debería destacar más que el vestido.
6. No trabajar el día anterior. Es importante descansar para ir radiante a la boda y lucir un rostro fresco.
7. Si se celebra despedida de soltera o preboda, la novia no debe ser la última en acostarse. Hay que reservar las energías para el día de la ceremonia, no se puede echar a perder después de tanto tiempo de preparación.
8. Y lo más importante, no discutir con la pareja, eso puede afectar a ambos, y se notará por dentro y por fuera. ¡La cara es el espejo del alma, y ese día debemos deslumbrar de felicidad!
