El verano ya está aquí y aunque lo ideal sería haber seguido una dieta sana y equilibrada con antelación, es muy probable que una vez más te hayas descuidado y el tiempo ahora juegue en tu contra. Tranquila, aún queda para la época de sol intensivo y bañador, pero debes ponerte en serio. Para lograrlo y presumir de tipazo este verano, el doctor Óscar Junco, experto en cirugía plástica y estética nos da las 5 claves para seguir una dieta estricta sin fracasar en el intento:
1. Márcate un objetivo realista
Marcar un objetivo nos hace sentir más motivados. Con una meta, sentimos que nuestros esfuerzos valen la pena, ya que sabemos que tendrán una recompensa. Además, tener un objetivo claro nos ayudará en momentos de debilidad, eso sí, ha de ser lo suficientemente realista como para que no lo veamos inalcanzable. Lo más habitual es marcar la cantidad de kilos que se quieren perder, pero también podemos marcarnos entrar en ese vestido o moldear una parte del cuerpo de una determinada manera.
2. Pide consejo a un especialista
Existen dietas y dietas y no todas serán las indicadas para nuestro cuerpo. La dieta que tanto le funcionó a una amiga o que recomiendan en una revista puede no ser efectiva en nosotros ya que depende del metabolismo. ¿Dieta hipocalórica, proteica, disociada? Un especialista analizará tu cuerpo y sabrá decir qué plan nutricional es el indicado para ti. Además, el nutricionista llevará un seguimiento de tus avances y engañarle será muy difícil.
3. Sigue la dieta con un amigo o familiar
En algunos momentos, seguir una dieta puede convertirse en algo sufrido. Si empiezas tu dieta a la vez que un amigo, familiar o compañero de trabajo, seréis un apoyo el uno para el otro. Además, ver que tu compañero sigue bien la dieta hará que tú también te veas capaz y si asistís a eventos sociales juntos, no romper el plan será más fácil.
4. No te obsesiones con los kilos
Marcar un objetivo es esencial, sin embargo, tampoco debemos obsesionarnos con los kilos. Es importante tomar conciencia de que hacemos la dieta por nosotros mismos, por nuestra salud y autoestima. Aunque pueda resultar difícil, intenta evitar las repetidas quejas sobre la báscula y recuerda que lo importante es verte y sentirte bien y apreciar las pequeñas mejoras, como poder volverte a poner ese top o pantalón que se te había quedado pequeño.
5. No abandones la dieta de golpe
El temido efecto yoyó. Hay dietas, como la proteica, en la que se prescinde de ciertos alimentos para que el cuerpo queme la grasa que nos sobra de forma natural. Al acabar la dieta e incorporar dichos alimentos se puede dar un efecto rebote. La clave está en no reincorporarlos todos de golpe, hacerlo poco a poco y siguiendo los consejos del nutricionista.