“Mi pelo es demasiado fino, se rompe con facilidad”, “Quiero más volumen, mi cabello apenas tiene cuerpo”. ¿Te sientes identificada con estas frases? Muchas mujeres sufren los tediosos problemas de tener el pelo fino. Este tipo de cabello es más débil, sensible y se rompe con mayor facilidad que otros, por lo que necesita una serie de cuidados específicos. Entre sus problemas habituales están: cabello quebradizo, falta de cuerpo y volumen, enredos y nudos habituales y un limitadísimo número de peinados que se mantengan todo el día.
Si este es tu caso, desde Revitalash Cosmetics nos dan una serie de pautas para que tu pelo esté más fuerte y con más cuerpo, sea cual sea la causa de la debilidad:
Aunque parezca un consejo algo antiguo, tiene toda su lógica: el cepillado mejora el riego sanguíneo y reparte el sebo que se forma en la raíz a lo largo de todo el pelo, lo que le aporta mucho brillo y evita que se enrede con facilidad.
Elegir los productos idóneos es tal vez lo más importante, además de desenredar bien el pelo mientras esté seco con un cepillo flexible para evitar roturas, tras lo que irían el champú y acondicionador de medios a puntas. Para que haga un mayor efecto, cepillar de nuevo el cabello y aclarar con agua templada, que ayudará también a sellar.
Además de evitar los champús convencionales, deberías limitar o prescindir de los tratamientos de peluquería demasiado agresivos para el cuero cabelludo, como los tintes o los moldeados permanentes. De vez en cuando sí que puedes optar por algún tratamiento más natural, a base de productos como la queratina, que ayudan a fortalecer el cabello evitando que este se rompa con facilidad manteniendo su flexibilidad y textura.
El color es sinónimo de vida y alegría, ¿por qué no también para el pelo? Las mechas y los reflejos también contribuyen al objetivo “melena con volumen” ya que crean efectos visuales interesantes. Por ejemplo, si aclaras las puntas ligeramente conseguirás un efecto de densidad en el cabello. En cambio, si combinas reflejos oscuros y claros crearás la sensación de movimiento y luminosidad. Además, la melena lucirá bonita y llena de matices. Eso sí, debes poner tu cabello en manos expertas, de manera que aplique productos colorantes suaves que eviten la rotura de los cabellos más finos.
Prueba con un cambio de look, como, por ejemplo, un corte de pelo que se adapte a la forma de tu rostro. Los estilismos cortos o escalados son los más favorecedores. Opta por un corte a capas, que lo aligere y ayude a aportar volumen, evitando a toda costa el pelo demasiado largo, ya que sólo aporta peso y tu pelo parecería aún más lacio. Además, lo más recomendable es dar forma recta y cuadrada a la parte de abajo del cabello para conseguir un efecto de más cantidad.
Además, de los consejos básicos anteriores para el pelo fino, ten especial cuidado al desenredarlo cuando está mojado, porque puedes llegar a dañar la cutícula del cabello. Conviene secar el cabello boca abajo o levantando las raíces, para así aportar más volumen.
El champú en seco es el gran aliado de los cabellos finos. Masajearlo suavemente con los dedos hará que adquiera más cuerpo y consistencia en la raíz. Por otra parte, la espuma da volumen sin añadir peso, los geles lo esculpen a tu antojo y los sprays, rellenan el cabello dándole soltura.
Los masajes también son muy recomendables. "Las manos son suficientes para que los folículos pilosos que tenemos debajo de la superficie de la piel, se estimulen mediante el masaje y el pelo pueda crecer de nuevo y sin problema. Eso sí, debe ser suave para activar la circulación de los más perezosos”, apunta el estilista Paul Tudor.
Por último, no olvides el poder de las extensiones. Más es más y para conseguir el máximo volumen, las extensiones pueden ser la solución. Para los cabellos finos, las extensiones de clip son las más recomendables, ya que no se dañará el cabello y se pueden retirar cuando quieras.
