Mezclar la harina con la leche, los huevos, la manteca de cerdo y el azúcar hasta conseguir una masa homogénea.
Espolvorear la mesa con un poco de harina y extender la masa con el rodillo hasta que quede fina. Cortar discos grandes y sobre cada uno se pone un poco de crema pastelera que deberá estar fría y consistente. Doblar la masa con cuidado albergando en su interior la crema pastelera. Sellar bien los extremos para que al freír no se salga el relleno.
Poner aceite de oliva abundante en una sartén e ir friendo los bartolillos en veces. Cuando están doraditos por ambos lados se sacan y se colocan sobre papel absorbente de cocina para que escurran el exceso de aceite.
Servirlos calientes o fríos espolvoreados con azúcar glas y canela en polvo.
Observaciones
Para unos 20 bartolillos.
Una tradicional receta madrileña.