Cortar las manzanas en cuartos. Saltear en una sartén los trozos de manzana en el aceite de oliva durante 10 minutos, sin dejar de remover. Espolvorear por encima tres cuartas partes de la fructosa y dejar que se caramelice un poco.
Engrasar un molde redondo para pastel. Disponer los trozos de manzanas cocidos presionando un poco.
Batir los huevos en un cuenco con el resto de la fructosa. Añadir la harina de almendras. Verter la mezcla encima de las manzanas.
Hornear 12 o 15 minutos.
Retirar y dejar que se enfríe durante 20 minutos.
Para desmoldar, poner boca abajo en un plato grande y dejar el molde colocado encima durante 30 minutos.