Batir 250 gramos de mantequilla ablandada con 200 gramos de azúcar hasta conseguir una mezcla cremosa, después añadir las yemas y el café soluble disuelto en un poco de agua y mezclarlo bien.
Dejar la preparación en el congelador hasta que se haya endurecido y formar bolitas.
Fundir el chocolate al baño maría con el resto de la mantequilla y bañar los bombones.
Dejarlos enfriar de nuevo hasta que el chocolate se haya endurecido por completo.
Se sirven los bombones espolvoreados con el resto del azúcar glas.